Justiniano Riveros
CONCEPCIÓN
La fiscala de la Unidad 5 del Ministerio Público, Ondina Cabral, indicó que una ex funcionaria municipal radicó denuncia a la Fiscalía, porque no pudo utilizar sus aportes a la Caja de Jubilaciones, ya que la Municipalidad le descontaba sus aportes, pero no los depositaba durante los años 2016, 2017 y 2018.
“Le fijé audiencia para hoy, a las 9.00, pero presentó una nota pidiendo otra fecha, sin embargo, ya tenemos los elementos y presentamos el acta de imputación solicitando medidas alternativas, ya que la expectativa de pena es de 6 meses a 5 años”, señaló, la agente fiscal.
El caso cae en el Juzgado de Garantías a cargo de la jueza Honorina Acosta, quien le tomará la audiencia 242 el lunes, a la mañana.
Esto se suma a la imputación que recibió el miércoles Urbieta por desacato judicial de parte del fiscal Carlomagno Alvarenga. La jueza María Petrona de Giaccomi debe darle las medidas en estos días.
El titular de la Comuna de Concepción soporta 12 días de movilización ciudadana que le pide su renuncia al cargo por una serie de supuestas irregularidades.
Los manifestantes recibieron hasta ahora sendas represiones como respuesta a sus exigencias.
Rinde cuentas. Urbieta presentó en la mañana de ayer su rendición de cuentas en el salón de actos de la Junta Municipal ante los funcionarios de la Municipalidad, la Gobernación y seguidores. Luego marcharon hasta la Catedral donde rezaron.
La presentación del balance de su administración duró 2 horas, durante la cual dio lectura, a través de un poyector, números y letras de ingresos y gastos en cada rubro.
Según expuso, su administración es transparente y no existe ningún motivo para que se le pida su renuncia. Insistió en que las deudas contraídas (casi 10.000 millones) pagará totalmente en el 2.020 y que la venta del Puerto Municipal Nanawa se ajusta a la legalidad. En relación a las deudas con la caja de Jubilaciones, dijo que su responsabilidad sería unos G. 900 millones y que la caja es usurera.
Tras recibir algunos discursos de apoyo, decidió marchar con su gente hasta la explanada de la Iglesia Catedral, donde rezaron.
Participaron el gobernador, Édgar López; los diputados liberales Andrés Rojas y Emilio Pavón; los concejales liberales Miguel Domínguez, Estrella Quevedo, Asunción Carvallo y Sisinia Silva.