Moriz, que también está imputado en el caso facturas clonadas, mencionó que todo comenzó cuando desde el partido le pedían que genere facturas para la rendición de cuentas. Menciona principalmente a autoridades del partido y en particular al representante liberal ante el TSJE, Primio Arce.
Dijo que, pese a las insistencias, no consiguió las facturas requeridas por la cúpula.
Posteriormente, en la misma declaración recientemente dijo que fue dirigente del sector de Alegre, a quien dijo conocer bien.
Aseguró lamentar lo sucedido y a continuación narró cómo el partido para la campaña de 2018 debió dar una suma para el Departamento de Alto Paraná, lugar donde Alegre ganó, pese a todos los pronósticos. Afirmó que los bonos expedidos fueron por el doble de lo que realmente se desembolsó.
“Trabajé muy de cerca, por 18 años, con el movimiento FIL con Efraín Alegre, los conozco muy bien, por lo que esto que está pasando me resulta penoso... en Alto Paraná de un comienzo ya nos pareció grosero que nos haga firmar bonos retirados por supuestamente G. 1.000 millones y, sin embargo, nos hace entregar a Ciudad del Este, en la citada casa de cambios Zafra por solo G. 500 millones”, detalla.
Negó además de que haya firmado un recibo por el monto total del bono y pidió que le muestren la prueba.