Esto fue en el marco de los Diálogos de ÚH por sus 50 aniversarios que usted puede verlo en Facebook Live.
INGLÉS. Cuenta Ramón que su padre fue un inglés rubio, de 1,90m de estatura que trabajó en los ferrocarriles, quien se casó con una paraguaya del interior del país y de cuya unión nacieron 10 hijos. “Soy el menor de 10 hermanos. Nací en la Chacarita, en el vagón de un tren y soy el único que le parece a mi mamá”, rememora entre risas en la charla en la que habló de sus múltiples facetas. Ex consagrado futbolista, una vez retirado entró al oficio de periodista invitado por Arturo Rubin, para luego iniciar una serie de entrevistas, de mucho éxito, a ex futbolistas de todos los tiempos, homejeándolos, cuyo trabajo sería pronto exhibido en Senatur, según adelantó.
Su otra gran pasión es la música. El “inglés” toca la guitarra, canta y compone; y entre sus varias obras está la canción Nos vamos al Mundial que en la previa del Mundial de México 1986 fue como un himno para alentar a la Albirroja. Bromeando afirma que hacerle cantar a sus compañeros de la Selección Nacional fue más difícil que clasificar al Mundial luego de 28 años. Hicks sigue siendo un hombre inquieto y veloz como en su época de futbolista. Es por eso que tiene listo un concierto a realizarse el próximo jueves en la Manzana de la Rivera, acompañado de su hija Melissa. Pero la “profesión” que más ama es la de ser padre (de 7 hijos y ya es abuelo) en cuya condición lanzó un llamado a las familias paraguayas a no perder las sanas costumbres y a los políticos a cultivar el deporte en los jóvenes, específicamente el fútbol, que asegura puede sacarlos de los vicios, clamando por más canchitas en los barrios como las hubo en su época.
Quedó mucho en el tintero: anécdotas, imitaciones y la idea de un reencuentro.