SAN PEDRO
Pobladores, docentes y alumnos de 10 compañías ribereñas del distrito de Santaní, Departamento de San Pedro, se encuentran aislados desde hace casi un mes, debido a que el único puente que los lleva a la ciudad fue quemado. Al no haber una respuesta del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) improvisaron una pequeña balsa para cruzar el arroyo Tapiracuái, apeligrando sus vidas.
El puente madera tenía aproximadamente 50 metros de largo; pero hace un mes fue consumido por el fuego, supuestamente provocado de manera intencional por desconocidos.
Los pobladores de San Isidro, Itapeby, San Blas, Novireta, 8 de Diciembre, Cruce Bettini, Navidad, entre otros, piden a las autoridades la urgente construcción de un puente con estructura de hormigón armado, ya que son varias las comunidades que utilizan esa salida para llegar a la ciudad de Santaní.
Estudiantes. Pese al peligro que representa la improvisada balsita, tanto docentes, alumnos y los pobladores se ven obligados a utilizarla, porque es la única manera para cruzar el arroyo.
El profesor Optaciano Sánchez, director de una de las escuela del lugar, señaló que diariamente la balsa, construida por los padres de familias, es usada por los alumnos y docentes que indefectiblemente deben pasar por el lugar para no perder clases “es un peligro, pero no tenemos otra alternativa, los padres también están conscientes del peligro, pero no quieren que sus hijos pierdan clases, esperamos que el MOPC construya el nuevo puente, tenemos la promesa, pero esto es urgente”, señaló el docente.