Del jardín de las leyendas
Fue un despoblado trágico en olvido,
donde el tropel sangriento de la raza
se engrandeció con la última amenaza
como el postrer arranque del vencido.
Allí la Alianza en su execrable caza
lanzaba su epiléptico alarido
y la ciclópea estirpe con su maza
quería llenar el bosque de sonido.
Luego escuchose un debatir violento
cual lo supremo de una lucha heroica
cuando fugaz se esquiva la victoria.
Y fue en un grito de dolor al viento
todo el sollozo de la raza estoica
en los vastos silencios de la Historia.
(Para la irrevocable Cristalización de un pensamiento.)
A la aparente realidad rehúyo
solo amo a la ilusión y a la quimera
con su apolíneo culto en esta esfera
mi frustrado vigor reconstituyo.
Si te obstinares en no serme tuyo
como hasta hoy, tuya, tu canción primera,
me he de volver inextinguible hoguera
que se ensimisma en el milagro suyo.
Porque a mis fuerzas, resbalando enigma,
yendo de la materia a lo extrahumano,
Sólo la irrealidad sin paradigma.
Les da sus brazos de cordial hermano
so exenta el alma de mortal estigma
me abismo al éter a sentir lo arcano.
(Fragmento)
Pasaron siglos... unas blancas velas
cual gaviotas nostálgicas, la arena
abandonaban de una playa amena
dejando estelas, desafiando el mar...
Si la vierais... ¡Con qué creciente empeño
las arrastraban a su azar los vientos!
Cual al liviano soplo los alientos
arrebatan ¡los pétalos de azahar!
Son unas carabelas españolas
allá las lleva el pensamiento humano,
van a buscar el fin del océano,
y tristes, mudas e imponentes son.
Van a buscar a un país de espumas hecho
donde duerme una ninfa abandonada,
van a buscar la Atlántida encantada
que en un delirio murmuró Platón.
Van a buscar albergue entre las olas
donde se encrespan las espumas.
Fueras van siguiendo tal vez a sus quimeras
hacia regiones donde duerme el sol...
Recordamos hoy a este poeta y periodista, nacido en San Miguel de las Misiones, en 1892, y fallecido en San Vicente de Yhú, en 1942.
Se caracterizaba por su espíritu bohemio en el ambiente literario asunceno. Su producción poética, que fue una permanente apelación a la identidad paraguaya, incluye Canto a la raza, de 1910; En la fiesta de la raza, de 1913; Del jardín de las leyendas, de 1914; y Surge et ambula, de 1924.
Umbral de palabras