A la reunión, presidida de forma conjunta por Canadá y Perú, asistieron por primera vez como miembros de pleno derecho Bolivia y Haití, lo que eleva a 15 el número de países que forman el Grupo de Lima. Acudieron como observadores Ecuador y República Dominicana.
Tras la reunión, el ministro de Exteriores de Canadá, Francois-Philippe Champagne, dijo que el grupo se expresó con una voz “unificada” en su necesidad de que Venezuela celebre lo antes posible elecciones presidenciales “justas y democráticas”.
Champagne añadió que “hoy es el principio” de un nuevo impulso del grupo que se concentrará en “aproximarse a otros países” en busca de apoyos que fuercen la celebración de elecciones y la salida del poder del presidente Nicolás Maduro, aunque sin explicar cómo lo lograrán.
Tanto Champagne como el canciller peruano, Gustavo Meza-Cuadra, reconocieron que más de dos años después de su creación, los esfuerzos del Grupo de Lima fueron estériles y que había un cierto cansancio entre sus miembros.
“Este grupo se reunió más de 18 veces. Nos damos cuenta que tuvimos desafíos, pero que tras la gira de Juan Guaidó hay un renovado impulso. Estamos revitalizando nuestros esfuerzos para asegurarnos que la comunidad internacional está detrás del pueblo de Venezuela”, explicó Champagne.
Meza-Cuadra reconoció que el Grupo de Lima desde su fundación en 2017 solicitó la celebración inmediata de elecciones presidenciales en Venezuela, pero que ahora no puede “esperar más”, porque la crisis llegó a proporciones históricas. “Tenemos que trabajar con otros actores“, añadió el canciller peruano. Champagne aseguró que Canadá intentará atraer a más países latinoamericanos al grupo.