Los choques dejaron entre 50 y 70 personas lesionadas, en su mayoría por pedradas y por heridas de balas de goma, indicó el director del servicio de atención de emergencias, Pablo Jure.
En la jornada, más de 20 personas fueron detenidas. Además, había una veintena de cortes en las carreteras.
Una movilización frente al parlamento provincial derivó en disturbios cuando activistas lanzaron piedras contra la guardia de infantería.
La reforma prohíbe expresamente los “cortes de calles y de rutas, así como toda otra perturbación al derecho a la libre circulación de las personas y la ocupación indebida de edificios públicos en la provincia”, lo que los manifestantes denuncian como una limitación al derecho a la protesta.
El texto también contemplaba modificaciones con respecto al derecho a las tierras de los pueblos indígenas, pero fueron suspendidas a último momento. La provincia está gobernada por Gerardo Morales, precandidato a presidente para las elecciones del 22 de octubre, al frente de un sector del liberal Juntos por el Cambio, opositor al gobierno de Alberto Fernández (peronista de centro-izquierda).
Morales y Fernández se acusaron mutuamente por los desórdenes. AFP