Detrás de las apariciones de Tiríka, la querida mascota de los Juegos ASU2022, hubo todo un equipo de trabajo que hizo posible que este ignoto felino se ganara el cariño de toda la gente, local e internacional.
Es lo que comenta Ricardo Deggeller, coordinador general de los Juegos Suramericanos ASU2022. “Realmente, no nos esperábamos este nivel de aceptación y de popularidad. Sabemos que siempre una mascota es importante y que gana cierto protagonismo, pero esto sobrepasó completamente nuestras expectativas”, afirma y revela cómo se gestó esta mascota que conquistó el cariño del público y se robó el espectáculo en los certámenes de esta fiesta que culminó anoche.
Aclara que fue el comité local que organizó estos Juegos Suramericanos el que tomó la decisión de tener a Tiríka como mascota. “Evaluamos todos los antecedentes que ya teníamos de mascotas en eventos deportivos; el Taguá de la Copa América 1999; Mimbí en el Mundial de Patinaje el año pasado. Hubo eventos donde tuvimos mascotas o imágenes como Guampa, Yacaré y evaluamos todo lo que ya existía hasta ese entonces”, refiere Deggeller.
Analizaron la fauna autóctona donde hay varias especies de aves, felinos y animales exóticos, entre ellos Tiríka.
El pájaro campana estaba como candidato; pero tomaron en cuenta toda la “repercusión e incidencia dentro del fútbol” con la Albirroja.
También quedaron por el camino el mono karaja y el jaguarete. La singularidad de Tiríka, especie de gato montés en situación de riesgo, hizo que les ganara la pulseada.
Acto seguido, trabajaron con la Secretaría de Política Lingüística para “guaranizar” el nombre porque aparece como “Tirica” en enciclopedias.
Diseño. Lo siguiente fue buscar el mejor diseño. Para el efecto, contrataron a una productora internacional instalada en Buenos Aires, Argentina, que trabaja específicamente sobre mascotas para eventos.
“Tuvieron a su cargo la mascota de Rosario y de los Juegos Olímpicos de la Juventud y otros eventos”, señala. Días después de recibir el traje, empezaron las primeras apariciones. La presentación de Tiríka fue en la Secretaría Nacional de Deportes (SND) haciendo esgrima y en el Comité Olímpico Paraguayo (COP). A partir de ahí –dice– trabajaron en el concepto de lo que sería la mascota.
“Si hay que darle una atribución al personaje te diría al equipo de trabajo, el equipo del comité organizador local de los Juegos porque en la medida en que pasaba el tiempo fuimos viendo que le faltaban cosas y fuimos dándole esa idea final”, subraya.
Versátil. Desde el inicio tenían claro que “no podía ser una mascota que solamente estuviera para posar ni estuviera solo caminando y gesticulando”. Tenía que hacer algo más, como bailar. “Encontramos que el diseño le ayudaba mucho con el baile y habíamos desarrollado tres o cuatro canciones o base para su coreografía; pero finalmente decidimos sacarlo”, explica.
Hasta que con el himno de los Juegos, la canción de Kchiporros, los pasos del simpático felino se hicieron virales con el challenge. “Ahí le identificamos a Tiríka con la coreo y a partir de eso empiezan las demás actividades”, apunta.
Ya les habían encargado a los diseñadores del traje para que la mascota pueda realizar movimientos. “Pero, en ese momento, no habíamos dimensionado que iba a terminar haciendo una vuelta carnero, una vuelta estrella o de repente esquiando en el agua”, se ríe al insistir que todo eso salió de la cabeza de un equipo de márketing del comité organizador.
Simpatía. “Vimos que teníamos que relacionar a la mascota con los deportes, que tenía que hacer algún movimiento y eso fue generando que a la gente se le vaya pegando. A partir de ahí a Tiríka se le fue relacionando con cada deporte”, suscribe.
Ricardo entiende que el clic con el público se produjo cuando Tiríka empezó a gesticular. “En algunas conferencias de prensa hacía como un papel de traductor y manejaba muchas expresiones de mimo, ahí generó cierta empatía. Después aumenta esa expectativa cuando empieza a bailar y, obviamente, explota cuando empieza a realizar movimientos propios de cada deporte”, y arriesga que “difícilmente encontremos otra mascota similar; es decir, que pueda llegar a ser igual que Tiríka o dentro del propio concepto que busque algo similar”.
bajo llave. Respecto a cuántas personas interpretan cada una de las varias presentaciones de Tiríka, prefiere evitar dar detalles como estrategia de márketing. “No rompamos la magia”, exhorta en referencia a las peculiares facetas de Tiríka.
“Ese es otro de los datos reservados. Tiríka es la mascota y nos enfocamos en lo que se ve. Cada uno queda con su apreciación o su criterio; pero fomentamos un solo Tiríka que es el gato montés o mbarakaja’i. Para nosotros es uno solo y es la mascota”, enfatiza.
la Clave. En cuanto a cómo se construye la “mejor mascota de la historia”, considerada así por Panam Sport, canal de televisión de los Juegos Panamericanos, Deggeller postula: “Trabajo en equipo, con un poco de locura y creatividad, mucho de prueba y error porque de repente nos imaginamos una cosa y termina siendo otra. Lo otro es no tener miedo, de aventurarse y de explorar todo lo que una persona puede hacer en la vida cotidiana, pero con un traje puesto”.
Por lo demás, como organizadores de los Juegos encargaron los peluches de Tiríka para ser entregados con las medallas. Unas 3.000 unidades se entregaron a los atletas premiados. Los derechos de venta fueron cedidos a la empresa Kyrios Sport, que fue el patrocinador oficial de los Juegos Suramericanos ASU2022.
“Tengo entendido que han traído un lote para la venta que ya se ha agotado. Después tenemos los Tiríka de producción nacional que siguen siendo propiedad de comercialización de la marca Kyrios”, concluye.