El contexto internacional es determinante en las exportaciones de carne. La alta demanda de China favoreció de manera indirecta a Paraguay y los ganaderos sostienen que las ventajas de comercialización persistirán, lo que además significa mayor inversión en el sector.
Aunque la apertura de nuevos mercados, entre ellos el de China, sigue siendo un reclamo de los productores pecuarios, la cadena cárnica reconoció que pudo aprovechar la concentración de competidores en el país asiático para ubicar más cortes de carnes en la región y a mejor precio.
El presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Pedro Galli, explicó que la aparición de la peste porcina africana en China generó la aparición de espacios importantes para cubrir la demanda. Se refirió a que desde el continente asiático creció la demanda de proteína animal, ya sea carne porcina y bovina, desde los países del Mercosur, donde Uruguay y Brasil son actualmente los principales proveedores, aunque Argentina también direccionaba sus cortes al mismo destino, sus envíos se redujeron debido al cepo que aplicó el Gobierno para controlar el precio local.
A raíz de este comportamiento, Paraguay tuvo el acceso más liberado para comercializar a Chile, el principal comprador de carne paraguaya, así como para cubrir el consumo local de Brasil y Uruguay.
“Todo indica que esta situación prevalecerá, lo que da mayor previsibilidad y certidumbre al futuro, promoviendo las inversiones en la producción y la instalación de nuevas plantas industriales de procesamiento”, indicó Galli sobre los factores que inciden en el crecimiento de la ganadería, que ahora está en auge debido a que el alto precio internacional se traslada al pago que reciben los productores por la materia prima. Por cada kilogramo al gancho de novillo, los frigoríficos pagan unos USD 4, aunque es difícil acceder al promedio semanal atendiendo que desde hace tres semanas la ARP no publica los datos correspondientes a través de su Comisión de Carne.
Acerca de las industrias que se preparan para operar en el país, hasta el momento están confirmadas la multinacional Marfrig, en el Departamento de Concepción, y Chajhá, de Horacio Cartes y Maris Llorens, en el Chaco.
Galli habló sobre la bonanza en el campo en la inauguración de la 75ª Exposición Nacional de Ganadería, ante varias autoridades, entre ellas el vicepresidente de la República, Hugo Velázquez, y el titular de la Corte Suprema de Justicia, César Diesel Junghanns.
En el lugar también mencionó la producción de otros tipos de carne, como la aviar y la porcina, y en ese sentido pidió la apertura de nuevos mercados.
“Lo más relevante de todo esto es que vamos a seguir creciendo. Tenemos todas las condiciones de clima, suelo, agua y capital humano para una producción ambientalmente sostenible, socialmente inclusiva y económicamente rentable”, agregó el dirigente ganadero.
En la exposición participaron más de 1.000 animales de seis especies y casi 30 razas. Durante las actividades que se extendieron del 16 al 26 de setiembre se eligieron los grandes campeones que se destacaron por su genética.
Aumentan envíos a la región
Las exportaciones a Chile, Brasil y Uruguay ascienden a casi 123.000 toneladas, equivalentes a más del 50% de los envíos totales al mercado internacional al cierre de agosto.
De acuerdo con el informe del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), Chile compró 96.745 toneladas; es decir, 42.900 toneladas más que los primeros ocho meses del 2020. Estas cifras coinciden con la recuperación de la demanda tras el primer año crítico de pandemia y la concentración del principal competidor, Brasil, en el mercado asiático. Este país vecino también aumentó sus importaciones, pues con 21.792 toneladas prácticamente duplicó el volumen negociado el año pasado.
Otro sorprendente cliente es Uruguay, que del noveno lugar escaló al sexto entre los principales destinos de la carne paraguaya con 4.368 toneladas, desplazando a Kuwait, Egipto y a la proveeduría marítima, que se habían destacado más en el 2020.