19 dic. 2025

¡Fuego he venido a traer a la tierra!

Hoy meditamos el Evangelio según San Lucas 12, 49-53.

San Agustín, comentando este pasaje del Evangelio de la misa, enseña: Los hombres que creyeron en él comenzaron a arder, recibieron la llama de la caridad. Es la razón por la que el Espíritu Santo se apareció en esa forma cuando fue enviado sobre los Apóstoles: Se les aparecieron lenguas como de fuego, que se posaron, repartidas, sobre cada uno de ellos (Hech 2, 3).

Inflamados con este fuego, comenzaron a ir por el mundo y a inflamar a su vez y a prender fuego a los enemigos de su entorno.

El apostolado en medio del mundo se propaga como un incendio. Cada cristiano que viva su fe se convierte en un punto de ignición en medio de los suyos, en el lugar de trabajo, entre sus amigos y conocidos.

El papa Francisco a propósito de la lectura de hoy dijo: “La palabra del Señor, ayer como hoy, provoca siempre una división: La palabra de Dios divide, ¡siempre! Provoca una división entre quien la acoge y quien la rechaza. A veces también en nuestro corazón se enciende un contraste interior; esto sucede cuando advertimos la fascinación, la belleza y la verdad de las palabras de Jesús, pero al mismo tiempo las rechazamos porque nos cuestionan, nos ponen en dificultad y nos cuesta demasiado observarlas.

Hoy he venido a Nápoles para proclamar juntamente con vosotros: ¡Jesús es el Señor! Pero no quiero decirlo solo yo: Quiero escucharlo de vosotros, de todos, ahora, todos juntos “¡Jesús es el Señor!”, otra vez “¡Jesús es el Señor!”. Nadie habla como él. Solo él tiene palabras de misericordia que pueden curar las heridas de nuestro corazón. Solo él tiene palabras de vida eterna.

La palabra de Cristo es poderosa: No tiene el poder del mundo, sino el de Dios, que es fuerte en la humildad, también en la debilidad. Su poder es el del amor: Este es el poder de la palabra de Dios. Un amor que no conoce confines, un amor que nos hace amar a los demás antes que a nosotros mismos”.

(Frases extractadas de http://www.homiletica.org/francisfernandez/franciscofernandez0467.htm yhttps://es.catholic.net/op/articulos/9238/cat/331/he-venido-a-arrojar-un-fuego-sobre-la-tierra.html).