Cuenta que hace 2 años, 29 gremios, de distintos rubros, no solo de turismo, realizaron el pedido de supresión de visas a la Cancillería, luego de que Brasil y Argentina adoptaran tal medida unilateralmente. “Estos países realizaron los cálculos y comprobaron que ellos son los que ganan cuando reciben a turistas australianos, estadounidenses, neozelandeses o canadienses. Estos dejan divisas”, resalta. Recuerda que habían hablado del tema con el entonces canciller Federico González y que este les admitió que el obstáculo era meramente presupuestario. La Cancillería dejaría de recaudar en promedio 1 millón 400.000 dólares por la emisión de visas. “Nuestra intención no es desfinanciar a la Cancillería, pero necesitamos hacer este cambio”, manifiesta.
“Con eliminar las visas de origen a ciudadanos de Estados Unidos, Canadá, Nueva Zelanda y Australia, como aún exige el Paraguay, se puede hasta triplicar la cantidad de turistas de estos países, además de que aumenta en hasta un 25% la inversión extranjera directa”, afirma André Gayol, de la Cámara Nacional de Turismo, en defensa del proyecto de ley que se encuentra en Diputados y que plantea la supresión de este requisito para reactivar el turismo.