El ex canciller José Félix Fernández Estigarribia, embajador del Paraguay ante Costa Rica, superó ampliamente la edad para jubilarse y ha cumplido el plazo máximo de permanencia en el exterior que la Ley Nº 1335/99 estipula en seis años continuados, sea en un mismo país o en más de uno.
Para los escalafonados con rango de embajador, 75 es la edad tope para jubilarse. Esto permite activar los ascensos y dinamizar el escalafón dando paso a los que van alcanzando esa categoría. En estos momentos hay seis nuevos embajadores y dos más que aguardan el decreto correspondiente por el que se les otorgará esta categoría, tras haber cumplido con los requisitos del curso de actualización y la defensa pública de un trabajo de investigación académica.
Fernández Estigarribia se había desempeñado como ministro de Relaciones Exteriores en la breve presidencia del liberal Federico Franco, tras la destitución del presidente Fernando Lugo, vía juicio político en el 2012. Su designación como embajador se dio por Decreto N° 2806 del 18 de diciembre de 2014, previo acuerdo constitucional del Senado. El embajador tiene 80 años. Tanto Federico González, canciller por unos meses del actual gobierno, como su sucesor, el actual ministro de Relaciones Exteriores, Euclides Acevedo, habían anunciado que aplicarían la Ley Nº 1335 “Del Servicio Diplomático y Consular” para dar cumplimiento al tiempo máximo de servicio en el exterior, como a la edad de jubilación.
Acevedo lo hizo en marzo pasado dando por terminadas las misiones de 9 embajadores, entre los cuales al menos dos se acogieron a la jubilación.
Otro embajador que ya sobrepasó los años de servicio en el exterior y debe retornar al servicio local es Enrique Jara, jefe de misión en la Embajada en Panamá, y que entre el 2013 y el 2017 cumplió la misma función en Venezuela.
Además, Ángel Ramón Barchini, embajador ante Qatar desde el 2014, aunque por designación política, considerando que no pertenece a la carrera diplomática.
Juan Andrés Cáceres, viceministro de Administración y Asuntos Técnicos del Ministerio de Relaciones Exteriores, había expresado en setiembre a ÚH que un grupo “bastante grande” de funcionarios diplomáticos, que cumplieron con el periodo de permanencia en el exterior, y que fueron cesados en sus cargos y se incorporaron al servicio local se acogieran al beneficio de la jubilación. Indicó que el 2021 marcaría un récord en número de jubilados.