Las estrellas de Crepúsculo (Twilight), Kristen Stewart y Robert Pattinson, esperan lograr a nuevos papeles, diferentes a los de vampiro, al reflexionar sobre lo que será su carrera tras el fin de la exitosa saga.
Con el estreno en Estados Unidos este fin de semana de La saga Crepúsculo: Amanecer, parte 2, el éxito de taquilla llega a su fin y se cierra un lucrativo capítulo en las carreras de los jóvenes actores.
Los cinco filmes, basados en las novelas de igual nombre de Stephenie Meyer, han generado una fortuna para ellos y para el estudio Summit Entertainment, recaudando USD 2.400 millones desde la primera película en el 2008.
“Estoy tan contenta que la historia esté contada”, dijo la actriz a los periodistas en Beverly Hills antes del lanzamiento del filme.
El actor británico Pattinson, compañero de Stewart dentro y fuera de pantalla excepto por unos pocos meses tras la aventura amorosa de la actriz con el director de Blancanieves, dijo que le llevará tiempo superar Crepúsculo.
“Creo que va a tomar diez años borrarlo realmente de mi cerebro”, dijo el actor de 26 años, quien interpreta al vampiro Edward Cullen en el filme. “Estoy tratando de firmar contratos y hacer películas de las que pueda estar orgulloso”, comentó a los medios.AFP
EL ÚLTIMO GRAN ESCÁNDALO EN EE. UU. SERÁ EXPLOTADO POR HOLLYWOOD
Los escritores con un guión sobre el escándalo sexual del general y exdirector de la CIA, David Petraeus, ahora pueden reunirse con cualquier personalidad de Hollywood.
Ejecutivos de los estudios han estado enfrascados en reuniones, cribando potenciales guiones que se puedan adaptar. Los agentes están recibiendo llamadas y los autores reciben correos electrónicos.
“Esto va a crear una gran película y un libro de interés”, dijo la agente literaria Judi Farkas que representaba al autor Antonio Méndez en la venta de los derechos cinematográficos de su libro Argo, la cinta de Ben Affleck basada en una misión de la CIA. “Habrá una lucha por los derechos”, dijo.
No está claro si alguno de los grandes jugadores de esta historia -Petraeus o su amante, su biógrafa Paula Broadwell- venderán los derechos de su relación y darán a los cineastas la versión desde dentro de una historia, que tiene todas las opciones de convertirse en una película de éxito o en una serie de la HBO, dicen los agentes.
“Se puede hacer una historia de los titulares, pero eso puede poner nerviosos a los estudios, particularmente si quieren dramatizar y retratar las vidas personales (de los protagonistas)”, dijo el abogado especializado en el mundo del espectáculo Jay Cooper.
Una película para la televisión sería la ruta más rápida para el consumidor y podría llegar a la pequeña pantalla en un año, dicen los expertos. “Este escándalo parece tener todos los elementos que Hollywood y el público buscan: conspiraciones, encubrimientos, la CIA, altos funcionarios políticos y amoríos”, dijo el productor de Hollywood Chris Armstrong.
Las aventuras sexuales de los políticos han atraído a grandes multitudes antes. En la película Primary Colors de 1998, basada en el personaje de Bill Clinton, se utilizó el libreto de Joel Klein sobre la campaña presidencial del presidente en 1992. REUTERS