Fuerzas parejas. Sportivo Luqueño y Santaní igualaron 1-1 en Campo Grande y siguen sin poder avanzar.
De trámite abierto, con constantes acciones de peligro en cada arco, el juego se volvió entretenido por la decidida convicción de proponer en ofensiva por ambos bandos.
El Chanchón con un esquema clásico (4-4-2) no se embelesó con los toques, por lo que la transición fue rápida, aprovechando los espacios que dejaba el Albinegro, que aglomeró más gente en la zona medular.
Las constantes embestidas desembocaron en el penal que Vázquez transformó en gol para Luqueño. La apertura no varió el ritmo del juego, por lo que se sucedieron más situaciones. El Auriazul continuó con su repertorio de insistir por los extremos, con balones largos, mientras que Santaní trabajó mejor en el medio, con rotación y buena triangulación, pero careciendo de efectividad en definición.
En la complementaria, el Tiburón Torres refrescó las bandas, para continuar con su mismo argumento. En Santaní, el debutante Caballero tardó en variar, pero acertó en la inclusión de Beltrán, que aportó jerarquía. Pitta aprovechó el toque preciso del Memo y estableció el 1-1. El empate no favorece a ninguno. Luqueño mantiene su 9ª posición en el promedio, lejos de la lucha en el Apertura, mientras que Santaní está hundido en ambos frentes.
