El comparativo de envíos al mercado internacional desde el 2017 muestra que la cifra más cercana al último reporte es la de hace cinco años con 62.727 toneladas y luego la del 2020 con 59.583 toneladas.
Entre los principales mercados se destacó el aumento de la demanda chilena en un 56% con la importación de 32.095 toneladas. Rusia permanece en el segundo lugar con 19.805 toneladas, mientras que Brasil desplazó a Israel al cuarto puesto con la importación de 7.021 toneladas. Por su parte, Taiwán quedó como el quinto mejor destino de la carne paraguaya con 5.769 toneladas, por debajo de las expectativas que tenía el Senacsa.
Con relación al mercado chileno, el presidente del servicio sanitario, José Carlos Martin, considera que los subsidios que se otorgaron en el país trasandino para enfrentar la pandemia hicieron que el consumo subiera de manera artificial. Si bien estima que será un buen año para el sector cárnico, duda de que se puedan mantener los altos niveles de febrero y marzo.
Destacó el empuje comercial en este primer trimestre, en tanto que desde la ganadería persiste el temor de ingresar a un nuevo periodo de sequía. “Lo que nosotros tenemos que esperar es que acompañe el clima, desde el 2019 no tenemos suerte con el clima, tienen que haber buenas lluvias hasta junio para entrar bien al invierno”, agregó.
La próxima actividad del sector será el segundo periodo de vacunación antiaftosa, que empezará el 19 de abril. La inmunización se extenderá a solo el 30% del hato ganadero, en el marco del programa que apunta a ir disminuyendo las dosis.
