06 may. 2024

Endeudamiento controlado

Cuando Mario Abdo Benítez estaba en campaña había prometido que daría prioridad a los préstamos otorgados por organismos multilaterales, por encima de la emisión de los bonos soberanos.

Al acercarse la fecha de las elecciones, su discurso se orientó a señalar que con los bonos soberanos financiaría la inversión en salud.

Ahora, su hermano y ministro de Hacienda, Benigno López, sorprende con la propuesta de elevar al Congreso un proyecto de ley por el cual el fisco pueda emitir bonos en cualquier momento del año sin autorización del Congreso, pero solo para mejorar el perfil de la deuda.

Al cierre del primer semestre de este año, la deuda pública ascendía a USD 7.761,3 millones, lo que representaba un 17,6% del producto interno bruto (PIB). Según un informe del Ministerio de Hacienda, a junio de este año la cantidad de bonos del Tesoro en circulación ascendía a USD 417 millones.

En el 2012, debido al aumento salarial desmedido aprobado por el Congreso –en su mayoría colorados–, comenzaron a emitirse bonos en el mercado interno con vencimientos de entre dos y seis años en promedio, un periodo muy corto para el Estado.

En los años sucesivos, el fisco vendió sus papeles a bancos, principalmente, para tener un flujo de caja constante y no cortar los pagos a proveedores, siempre con vencimientos muy cortos. Y esta deuda es la que necesita ser negociada y extendida a plazos mayores para que el Estado pueda comenzar a trabajar sobre un mejor gasto público.

Para ello, Hacienda también deberá superar otro corset: la Ley de Responsabilidad Fiscal, que establece mecanismos para manejar el gasto estatal. Esta normativa permite un saldo rojo en las cuentas fiscales de un máximo de 1,5% del PIB.

Hasta ahora, el Tesoro paraguayo no logra tener una cifra inferior al 1% de saldo negativo.

Modificar esta ley para aumentar el endeudamiento a costa de un mayor déficit fiscal no es recomendable. Por ello, la propuesta que el nuevo Gobierno acerque al Congreso Nacional deberá ser muy bien estudiada. Si bien Paraguay precisa seguir invirtiendo en obras públicas, y para ello necesariamente deberá seguir apelando al endeudamiento –vía bonos soberanos o préstamos de organismos multilaterales–, es necesario fijar topes anuales a esta fuente de financiamiento.

A la par, urge elaborar proyectos que permitan al sector privado entrar a invertir en obras de gran envergadura, garantizando la recuperación de su inversión, pero sin dejar de lado el aspecto social.

Ahora que comienza el gobierno, Mario Abdo Benítez deberá pactar con el sector político leyes económicas que garanticen mantener el crecimiento económico y la estabilidad fiscal.

Encontrar el equilibrio entre la inversión privada, el financiamiento a largo plazo y tarifas que puedan ser abonadas por el pueblo es una tarea que deberá ser terminada por este Gobierno si quiere que el Paraguay avance a la par de otros países.

Además, es necesario que las medidas económicas que ejecute Abdo Benítez tengan como principal enfoque a la clase social más desfavorecida, para que los índices de pobreza se reduzcan. Sanear las cuentas fiscales, con un endeudamiento controlado y el gasto público enfocado en la gente será la mejor herencia que pueda dejar cuando se vaya.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.