Las Águilas en el primer tiempo desnudaron las falencias en las marcas que tenía Olimpia, con desbordes e intensidad, parecía que hasta le podían arrebatar la victoria al equipo favorito.
Pero con el gol anulado de manera temprana y con el correr de los minutos, ese ritmo fue aminorando, dejando los espacios que un equipo como Olimpia no perdona.
Destacable las labores de Cristaldo, Noguera y Campuzano, estos dos últimos recuperando balones e iniciando la creación de juego; el primero siendo responsable de habilitaciones para que los atacantes de General queden de cara al gol.
Otro partido. Con el gol anulado, Olimpia se despertó de un mal primer tiempo, esto empujado aún más por el golazo de Nicolás Domingo que antes de finalizar la etapa abrió el marcador.
Con el 1-0, el Decano hizo lo suyo, se adueñó del trámite del partido. Le robó la pelota a su rival y volvieron los pases entre líneas que tanto daño hacen a los defensivos.
Domingo empezaba las jugadas desde el fondo, casi como líbero; Camacho retrocedió para ser el nexo entre medio y ataque; al igual que Derlis González, dejando a Roque como referente de área; este ingresó por un Alejandro Silva de mala tarde.
Con tiempo y espacio, llegó el segundo gol por parte de Derlis González y el tercero de los pies de Hugo Fernández; el descuento fue de Arévalos con un cabezazo frontal.
Olimpia quiere el penta y si los rivales lo dejan jugar, rumbo a su objetivo.
Olimpia venció 3-1 a General Díaz en un partido con polémica en fallos arbitrales.
Nicolás Domingo
El volante desde atrás manejó los hilos del juego del Decano, además ayer anotó su primer gol en Paraguay.