Senadores del Frente Guasu cuestionaron severamente ayer al presidente de la República, Mario Abdo Benítez y también a miembros de la bancada abdista, por buscar responsabilizar a este sector de una campaña de desestabilización contra el Gobierno. Instaron al Poder Ejecutivo a rever su política y preocuparse por poner en marcha soluciones, dado que el termómetro ciudadano está candente según el sondeo al que dijeron tener acceso.
Durante la sesión ordinaria de ayer, el senador Carlos Filizzola dijo que “el presidente Mario Abdo Benítez debe asumir su inutilidad como titular del Poder Ejecutivo y no estar responsabilizando al Frente Guasu de desestabilizadores”.
Aseguró que su sector no está detrás de ningún proyecto que busca generar crisis en el país, así como acusaron los miembros de la bancada abdista en el Senado
“Ellos son quienes deben demostrar (sus acusaciones). Esto (por las movilizaciones) sucede en otros países y se asustan todos. En medio del susto hablan de las ONG y del Frente Guasu. En 60 años de gobierno (de los colorados), este es el país que nos dejaron”, afirmó.
El líder de la bancada luguista, senador Hugo Richer, añadió que el Gobierno de Mario Abdo debe dar explicaciones de su “inutilidad” a los que le pusieron en el cargo. “Mario Abdo parece entrenado para meter la pata. Que Galaverna y Bacchetta vayan y le pidan cuentas al presidente y no al Frente Guasu. Estamos orgullosos de estar con la gente que protesta porque es un derecho, pero ellos (los del gobierno) consideran que es desestabilización”, refirió.
Por su parte, Sixto Pereira pidió a los oficialistas a acusar de frente y con argumentos, cuando afirman que dirigentes del Frente Guasu están en plan de desestabilizar al Gobierno. “El problema del país es la falta de respuesta a los problemas sociales y esa falta de respuesta por parte del Gobierno a sus necesidades”, alegó Pereira.
Esperanza Martínez también se sumó a sus pares y exigió acción ante las reivindicaciones. Había afirmado por medio de su cuenta de Twitter que al país no lo desestabiliza una oposición que plantea un modelo diferente, “sino los un millón seiscientos mil compatriotas que viven en la pobreza, la injusticia que castiga al débil y protege al poderoso”.
Contra Calé. Además de la fricción de este sector con el Gobierno de Mario Abdo, quien dijo que detrás de las luchas existe una “contaminación” ideológica, más clara fue la descalificación por parte del senador Juan Carlos Galaverna hacia el Frente Guasu en referencia a que tendrían intervención en un plan de desestabilizar al gobierno.
“Primero, las oenegés, últimamente tienen un gran protagonismo el Frente Guasu, y algún sector del PLRA, el efrainismo que sigue sin digerir su derrota rekutu en elecciones”, dijo el senador abdista el miércoles al salir del Palacio de López.
Los roces verbales y las diferencias entre miembros de este sector y parte de la oposición se van marcando a medida que se acerca la fecha de una movilización campesina en contra del Gobierno. A todo esto cabe remarcar la cercanía de las municipales, que hace que las posturas políticas sean más encontradas.