Ante este panorama, el Departamento de Salud Mental del Hospital General Pediátrico Niños de Acosta Ñu inició la campaña anual de prevención de violencia hacia niños, niñas y jóvenes con el lema Por una Navidad sin violencia.
La iniciativa contempla una serie de charlas online y una corrida, mecanismos para prevenir y visibilizar la situación que atraviesan los niños y niñas en el país. La campaña está dirigida a padres, tutores, docentes y aquellos que cuidan niños.
“Esto es modo de dar herramientas a la población para mejorar la salud mental de los niños y adolescentes y resignificar la Navidad como un periodo de resiliencia y promover una Navidad sin violencia”, explicó la doctora Lourdes Zelaya, del Departamento de Salud Mental. Añadió que las cifras de violencia aumentaron en plena pandemia, según los casos atendidos en el Acosta Ñu.
IMPACTO. Las secuelas en los niños son emocionales y podrían sufrir, a largo plazo, cambios estructurales y funcionales en el cerebro. Los tipos de maltratos más frecuentes que se registran son violencia intrafamiliar seguida de abuso sexual; también figuran en sus estadísticas consultas por negligencia, maltrato sicológico y maltrato físico.
El grupo etario más afectado son niños y niñas de entre 10 a 14 años. Algunas consecuencias son los trastornos depresivos, ataques de pánico e intento de suicidio en niños menores de 10 años.
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casos registrados como violencia en el Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu corresponden a niñas.