Añadió que la idea es que este acuerdo por la tarifa dure al menos tres años, “para evitar más desgastes en futuras negociaciones”. Este periodo de vigencia tendría el nuevo acuerdo operativo que favorecerá a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), aunque no se saben detalles del documento, cuyo antecedente favorecía a la estatal en la compra de la energía excedente de Itaipú.
Giménez dijo que la intención es crear un fondo binacional para invertir en la infraestructura eléctrica. Señaló que la otra alternativa es vender la energía a precio de mercado en nuestro país para generar esos recursos que necesita especialmente la ANDE. “Faltan detalles, se negocian aspectos que hacen al acuerdo operativo, las bases en la visión de los próximos 50 años que es el Anexo C. Tres años es la propuesta de Paraguay, para no tener este desgaste todos los años”, insistió.
Reunión. Autoridades paraguayas y brasileñas de la IB afirmaron el martes tras una reunión que están cerca de las definiciones. “Destacamos el avance que hemos emprendido, que nos augura un horizonte breve para poder concluir las negociaciones relacionadas a la tarifa, y avanzar rápidamente en la conclusión del acuerdo del Anexo C”, declaró entonces el canciller paraguayo, embajador Rubén Ramírez Lezcano.
Por su parte, el titular del MIC indicó que en el corto plazo todavía le conviene a Paraguay una tarifa alta en Itaipú, porque el país consume apenas el 20% de la producción de la central. “Somos exportadores de energía. Brasil es importador, y presiona por la tarifa baja”, reconoció. Igualmente, contó que la venta de energía a las criptominerías es un plan a corto plazo, porque luego Paraguay necesitará esa energía. Además, detalló que está sobre la mesa el proyecto de gasoducto regional, en paralelo con la ruta bioceánica, un plan que podría ser financiado por Itaipú.
El ministro Javier Giménez también indicó que los recursos adicionales que se obtengan a través de la Itaipú o la venta de energía a las criptominerías serán muy útiles para la ANDE, que necesita de USD 600 millones al años. La administración eléctrica detalló que en el 2023 la inversión llegó a USD 287,3 millones, en tanto que en el 2022 se alcanzó los USD 330 millones. “En el 2020 hemos ejecutado USD 270 millones, rompiendo el récord histórico de inversión de la ANDE, alcanzado en el 2014, que fue de USD 126 millones”, había relatado Félix Sosa, titular de la ANDE, añadiendo que en el 2021 se invirtieron USD 311 millones, la mitad de lo que se necesita.
