Disputado y emotivo de principio a fin. Un trámite electrizante que no dio respiro a los que se llegaron hasta la Olla azulgrana, y dos verdaderos golazos, el primero por la jugada individual y la definición, mientras que el otro por la potencia, precisión y el momento en que llegó, hicieron que el choque entre Olimpia y Guaraní sea un Clásico con todas las letras.<br>FRENTE EN ALTO. Si bien el juego terminó empatado, lo que significa un punto para cada uno, en estos casos y por la forma en que se logró la paridad, el equipo decano lo disfruta como si fuera una victoria y además influye mucho en lo anímico, teniendo en cuenta el choque de la próxima fecha ante su tradicional rival.<br> Por parte de Guaraní, los reproches entre jugadores al final del juego y la salida con la cabeza gacha o el rostro tapado dieron una clara señal de la desazón, porque con ese zapatazo de Darío Caballero sobre el final del encuentro prácticamente se les escapó el tren de la lucha del campeonato.<br>CLARO DOMINADOR. Pero vayamos a lo que fue el desarrollo del encuentro. Un juego donde en la primera parte el Aborigen fue claro dominador de las acciones. <br>Los dirigidos por León siempre estuvieron dos pasos adelante de su rival, tanto a la hora de atacar como al momento de defender. Comandados por Cáceres Cañete, quien hizo olvidar por completo la ausencia de Jonathan Fabbro, el Indio se movió a la perfección en ataque y exigió al máximo a Ever Caballero.<br> Olimpia, un equipo partido a la mitad y con Lazaga como el único en punta, no encontró respuesta futbolística hasta pasada la media hora.<br>Sobre el final el Decano equiparó fuerzas y logró generar dos situaciones claras de gol, donde los Joel Silva y Benítez callaron el grito de gol.<br>OTRA ACTITUD. Para la complementaria Almeida modificó la figura táctica, realizó dos modificaciones y eso le dio un mejor balance al equipo en todas las líneas.<br> Julián Benítez, que en cada intervención era una verdadera pesadilla, pasó a todos los que tenía en frente y definió al palo más lejano de Caballero.<br>Premio para el que venía haciendo mejor las cosas y castigo para un equipo que comenzaba a desplegar un mejor juego.<br>Con el resultado en contra Olimpia no bajó los brazos y se fue en busca de la paridad. Sin mucha claridad, abusando de los centros, pero siempre empujando hacia adelante.<br>Caballero volvió a parar un mano a mano para mantener viva la esperanza del empate. Paridad que llegó en el último suspiro del partido con un tremendo disparo desde fuera del área de Darío Caballero.<br>EVER CABALLERO<br>El resultado final hace que la balanza se incline por el portero del Olimpia, quien tuvo una gran actuación. Caballero fue el responsable de que su equipo no vaya en desventaja al descanso y luego que Guaraní no amplíe la ventaja. En el aborigen los que tuvieron buena actuación fueron Cáceres Cañete y Julián Benítez.<br>