Por Stephen Brown, de REUTERS
Ciudad del Vaticano
El papa Benedicto XVI subrayó ayer en un mensaje a Turquía su respeto por la fe islámica, que muchos musulmanes creen que retrató como violenta en un discurso el año pasado.
El Pontífice apeló a todas las religiones a denunciar la violencia y, dándole la bienvenida al nuevo embajador de Turquía en el Vaticano y recordando su viaje del año pasado, elogió al país como un “puente” entre Oriente y Occidente.
Sin embargo, no llegó a respaldar sus aspiraciones a la
membresía de la Unión Europea.
“Durante mi memorable viaje mostré reiteradamente el respeto que la Iglesia Católica tiene por el Islam y la estima que el Papa y los fieles sienten por los creyentes musulmanes, especialmente en mi visita a la Mezquita Azul de Estambul”, dijo en un discurso.
"(...) Los creyentes de diferentes religiones deberían intentar trabajar juntos por la paz, empezando por condenar la violencia, la que en el pasado se usó muy a menudo bajo el pretexto de motivación religiosa”, agregó el Papa nacido en Alemania.
Durante su gira por Turquía a fines del año pasado, el Papa incluso rezó mirando hacia la ciudad santa de la Meca en sus esfuerzos de reconciliación con los musulmanes, muchos de los cuales se sintieron ofendidos por un discurso en Alemania.
Las polémicas palabras de Benedicto XVI fueron pronunciadas en setiembre pasado cuando incluyó una cita medieval acerca del Islam y su difusión por medio de la violencia en un discurso.
DISCULPA ABIERTA. El Papa se distanció de la cita en sí misma, pero no cedió ante los pedidos de los musulmanes de una disculpa abierta. Sin embargo, su visita a Turquía fue bien recibida por muchos musulmanes como un gesto sensible.
El Sumo Pontífice también revisó opiniones críticas respecto de las aspiraciones de Turquía a ingresar a la UE, que había expresado en su anterior cargo como prefecto de la doctrina de la Iglesia Católica.
Durante su viaje a la nación turca manifestó su apoyo abierto a la intención de Ankara de obtener la membresía de la UE.
En el discurso del viernes Benedicto XV elogió el rol de Turquía “como puente geográfico e histórico entre los continentes de Europa y Asia, y como cruce de culturas y religiones”.
Pero también presionó por un mayor reconocimiento legal en Turquía para la pequeña comunidad de católicos romanos que vive allí, lo cual, pronosticó, ayudaría en las relaciones con la Iglesia Ortodoxa local.
Asimismo, Benedicto XVI apreció los esfuerzos de Turquía en el seno de la comunidad internacional en favor de la paz, y en especial su labor “para la reapertura de las negociaciones en Oriente Próximo” así como su labor para “la reconstrucción” del Líbano y para favorecer “el diálogo constructivo entre todas las partes que constituyen la sociedad libanesa.”