El papa Francisco privó del estado clerical a Fernando Karadima Fariña, condenado en 2011 por la Justicia canónica a una vida de reclusión y penitencia por violaciones y abusos sexuales a menores en Chile, informó la Santa Sede.
Se trata de una medida más en la limpieza que está realizando el papa Francisco en la Iglesia Católica en Chile, después de que en mayo el Pontífice mandara llamar a 34 obispos chilenos al Vaticano y estos presentarán sus renuncias en bloque tras reconocer que habían cometido graves errores y omisiones.
“Estábamos ante un caso muy serio de podredumbre y había que arrancarlo de raíz”, comentó el portavoz del Vaticano, Greg Burke, acerca de la medida adoptada por Francisco.
Agregó que “se trata de una medida excepcional, sin duda, pero los delitos graves de Karadima han hecho un daño excepcional en Chile”. Según Burke, “la privación del estado clerical de Fernando Karadima es un paso más en la línea férrea del papa Francisco ante los abusos”.
“Los católicos de Santiago y la gente de buena voluntad estamos llamados a acoger esta determinación del Santo Padre (...) y hacerlo con esa actitud de colaborar con la tarea propia de la Iglesia de reparar todo daño causado a las víctimas y también a todas las personas que han sufrido y sufren por este hecho”, dijo el cardenal italiano Ricardo Ezzati. efe