“El estilo de Dios y del cristiano: La humildad. Hay otra vía, contraria al camino de Cristo: La mundanidad. La mundanidad nos ofrece el camino de la vanidad, del orgullo, del éxito. Es la otra vía. El maligno se la propuso a Jesús cuarenta días en el desierto, Jesús la rechazó sin dudarlo. Y, con él, podemos vencer esta tentación en grandes ocasiones y en circunstancias ordinarias de la vida”.
“Hay una condición fundamental para recibir el consuelo de Dios, y que hoy nos recuerda su Palabra: Hacerse pequeños como niños. (…) Para acoger el amor de Dios. La verdadera grandeza del hombre consiste en hacerse pequeño ante Dios. Porque a Dios no se le conoce con elevados pensamientos y estudios, sino con un corazón humilde y confiado.
El Niño es aquel que no tiene nada que dar y todo que recibir. Es frágil, depende del papá y de la mamá. Quien se hace pequeño como un niño se hace pobre de sí mismo, pero rico de Dios. Algunas palabras de Santa Teresa del Niño Jesús, a quien recordamos hoy. Ella nos señala su “pequeño camino” hacia Dios, “el abandono del niñito que se duerme sin miedo en brazos de su padre”, porque “Jesús no pide grandes hazañas, sino abandono y gratitud”. Pidamos hoy, la gracia de un corazón sencillo, que cree y vive en la fuerza bondadosa del amor, pidamos vivir con la serena y total confianza en la misericordia de Dios.
(Frases de https://www.mccmurcia.org).