18 abr. 2024

El acusado de tratar de atentar en Nueva York se enfrenta a cadena perpetua

Nueva York, 4 may (EFE).- El estadounidense de origen paquistaní Faisal Shahzad, acusado hoy de tratar de cometer un atentado con coche bomba en Nueva York el pasado fin de semana, se enfrenta a penas de prisión que podrían alcanzar la cadena perpetua.

La Fiscalía federal del Distrito Sur de Nueva York detalló hoy a través de un comunicado que dos de los cargos presentados contra ese joven de 30 años, que ha confesado haber tratado de hacer explotar un vehículo en plena plaza de Times Square el pasado sábado, implican penas máximas de prisión de por vida.


El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, interviene durante una rueda de prensa sobre el fallido intento de ataque con coche bomba en el Time Square de Nueva York, junto al Vicedirector del FBI, John Pistole (i) y la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, en la sede del departamento de Justicia en Washington DC. EFE | Ampliar imagen

Esos dos delitos son “el uso de armas de destrucción masiva” y el de cometer “actos de terrorismo más allá de las fronteras nacionales”.

Además, se le ha acusado de “usar un dispositivo destructivo en relación con un delito de violencia”, que implica una pena mínima de 30 años para todo aquel al que se le halle culpable, así como de transportar y recibir explosivos, lo que podría condenarle a otros 10 años de prisión.

El quinto delito que se le imputa es el de “dañar y destrozar propiedades por medio de fuego y explosivos”, lo que supone una condena mínima de 5 años de prisión y un máximo de 20.

“Quiero agradecer a los estadounidenses que dieron la voz de alarma al observar el sorprendente hecho de que un Nissan Pathfinder estuviera echando humo en el centro de Manhattan la noche del pasado sábado”, dijo el fiscal Preet Bharara, en un comunicado en el que prometió que la Fiscalía que dirige “no descansará hasta que el último terrorista sea neutralizado y haya rendido cuentas”.

En ese mismo comunicado, el agente del FBI George Venizelos recordó que su departamento y otros organismo con los que colabora “tienen la responsabilidad primordial de impedir y detener a aquellos que quieren hacernos daño”.

“Los agentes que ayudaron a una resolución rápida y segura del incidente de Times Square han de ser elogiados por su diligencia y determinación”, apuntó Venizelos, quien aseguró que Shahzad “se enfrenta ahora a la sombría perspectiva de un futuro en la cárcel”.

Por su parte, el jefe del Departamento de Policía de Nueva York, Raymond Kelly, añadió que “Nueva York respira hoy un poco más tranquila, debido en gran medida a la presteza de los policías y agentes del FBI, así como al personal de aduanas del aeropuerto de JFK”.

Shahzad, detenido en ese aeropuerto esta madrugada, compareció hoy ante el juez federal Kevin Nathaniel Fox, de Nueva York, donde la Fiscalía le leyó los cargos, después de haber confesado que recibió entrenamiento con explosivos en un campamento de la región paquistaní de Waziristan, feudo de los talibanes.

Según explicó el FBI, Shahzad se ha mostrado “cooperativo” durante los interrogatorios y “ha proporcionado detalles valiosos” sobre su participación en este acto terrorista.

Mientras, en Pakistán se habrían producido varias detenciones de personas vinculadas al sospechoso, que obtuvo la ciudadanía estadounidense en abril de 2009 y en julio de ese año viajó durante varias semanas a su país de origen.

Según varios medios estadounidenses, el detenido dijo a los investigadores que actuó en solitario y negó cualquier vinculación con grupos extremistas de su país de origen.

En el vehículo que trató de hacer explotar, y que compró por internet por 1.300 dólares, había varias bombonas de gas propano, bidones de gasolina, material pirotécnico y fertilizantes que, de haber explosionado, hubieran causado múltiples heridos y un gran incendio.

El sospechoso, residente en Bridgeport (Connecticut), fue capturado cuando estaba ya sentado en un avión de Emirates Airlines que se dirigía a Dubai y se cree que su destino final era Islamabad, la capital paquistaní.

También se ha sabido que en el automóvil que utilizó para trasladarse al aeropuerto encontraron una pistola y munición y un mapa, y que su nombre, según señaló el subdirector del FBI, se incluyó poco antes de su detención en una lista de personas que no tienen permitida la entrada a este país.