En la sesión de ayer, los diputados se ratificaron en aprobar la reprogramación del presupuesto de la Cámara Baja, a fin de pagar los salarios y aguinaldos de 250 operadores políticos que fueron contratados de manera irresponsable por Miguel Cuevas, cuando éste era titular del organismo legislativo.
El mismo proyecto ya fue aprobado el 27 de agosto en Diputados y el 25 de setiembre el Senado rechazó.
Tras la ratificación de ayer, el proyecto vuelve al Senado, que debe contar con más de 30 votos para rechazarlo de vuelta y enviarlo al archivo, o de lo contrario quedará sancionado e irá a la presidencia, donde Mario Abdo Benítez tendrá la última palabra.
Esta reprogramación de G. 1.995.245.888 servirá para enmendar la mala administración de Miguel Cuevas al frente de la Cámara de Diputados que dejó muchas secuelas.
Para cubrir el agujero fiscal que dejó Cuevas, serán sacados de otros rubros, como el de combustibles, insumos de oficinas, productos alimenticios, para redireccionarlos al pago de jornales, honorarios profesionales y gratificaciones por servicios especiales, de modo a cubrir hasta diciembre los contratos realizados bajo la gestión de Cuevas.
En detalle, se restará G. 1.050 millones del rubro de combustibles, y posiblemente afectará a las comisiones, no así a lo que reciben mensualmente los diputados. También se descontarán G. 346 millones de los gastos por servicio de mantenimiento y aseo. También se extraen unos G. 250 millones de lo previsto para subsidio familiar, cuyo monto total es de G. 1.631.719.100.
De los insumos de oficina se restan G. 165 millones; de los productos alimenticios se utilizarán G. 118 millones; también se utilizarán unos G. 30 millones del rubro de servicios técnicos y G. 35 millones de lo presupuestado para otros servicios. De esa manera, la Cámara Baja pretende reunir los casi G. 2000 millones para pagar a los funcionarios que fueron contratados sin previa evaluación del presupuesto.
Sin debate previo para su ratificación, 61 diputados se mostraron a favor y solamente Kattya González votó en contra. La legisladora Cristina Villalba argumentó a favor de la reprogramación solicitando el acompañamiento de sus colegas.
En agosto, cuando fue presentado el proyecto, el titular actual de la Cámara Baja, Pedro Alliana sostuvo que no encontró “la casa ordenada”, y que a pesar de que disminuyó el número de funcionarios, no alcanza el dinero para cubrir los gastos. Aseguró que sin la reprogramación apenas se cubrirá hasta el mes de octubre y que desde noviembre ya se le dejaría sin salario a los funcionarios contratados.
Los legisladores de la oposición denunciaron en varias ocasiones la mala gestión de Cuevas, y pidieron que no se contrate a más gente sin tener en cuenta el presupuesto.
A su vez, Kattya había indicado que hay más de 2.380 funcionarios y muchos de ellos no tienen funciones.
Cuando fue rechazado en el Senado, varios legisladores indicaron que la responsabilidad debe recaer sobre Miguel Cuevas y no sobre los rubros que serán recortados.
Cabe recordar que el ex titular de la Cámara Baja está siendo investigado por enriquecimiento ilícito por su gestión como gobernador.