El sociólogo investigador Carlos Peris evaluó los tres años del gobierno del presidente de la República, Mario Abdo Benítez, resaltando que la pandemia demostró la gran improvisación en su gestión. “Los tres años del gobierno de Abdo se caracterizaron por una improvisación constante. La pandemia, de hecho, fue la muestra de ello. Medidas que luego se retrajeron, contradicciones entre gente de su propio equipo y el caso de las vacunas, apostando todo en un principio por el mecanismo Covax, fue la más clara muestra de ello”, expresó.
Por otro lado, se refirió a la gran desconfianza de la ciudadanía hacia las instituciones y su relación con los casos de corrupción. Indicó que lo más grave en este sentido es la impunidad. “El problema de la corrupción radica un doble daño, primero, en el sentido del dolo al patrimonio del Estado, pero, el segundo, y quizás el más grave, es la impunidad que origina un descreimiento total de los mecanismos legales como imperativo categórico de progreso y apoyo, lo que serían las vías legales”, apuntó.
Peris indicó que es necesaria una transformación del sistema, pero existe resistencia del principal grupo de poder. “El Partido Colorado, al igual que otros partidos políticos e instituciones, se halla cooptado por élites productivas/empresariales. Aquí nos remitimos a la cuestión de la financiación de las campañas o a las presiones implícitas de estas élites que hacen y, posteriormente, afectan, directa o indirectamente, a la toma de decisiones. Se necesita una transformación en el sentido de dar una mayor fortaleza al Estado en su toma de medidas. Muchas de ellas, en verdad, representan más a los intereses de ciertos grupos que a las mayorías”, subrayó.
El sociológico manifestó que la política nacional actuó siempre en defensa de los intereses del momento. “Las situaciones y los intereses del momento han marcado el accionar político, no una agenda o línea de Gobierno estable. Entonces, según las circunstancias, de quién lo pide, en qué contexto, bajo qué términos o qué se quiere mostrar, se acciona de una manera por parte del sector dirigencial. Hoy en día se quiere dar la idea de que ciertos sectores del Gobierno son afines a la izquierda, como esa es la idea, todo el aparato discursivo y accionario –de los opositores a ello– se encarga de afirmarlo. No se gobierna por políticas, se gobierna por intereses”, remarcó.
Sobre si considera que las reglas del cartismo son señales del modelo que representará Santiago Peña si gana en el 2023, indicó que va más allá de una persona. “Es una realidad que el Estado y los partidos, en su mayoría, se hallan cooptados por las élites empresariales/productivas, que van a tener su grado de influencia”, afirmó.
Los tres años de Abdo se caracterizaron por una improvisación constante. La pandemia fue muestra de ello. Carlos Peris, sociólogo.