De esta manera, el papa Francisco nombra al padre Guillermo Steckling, de los Padres Misioneros Oblatos de María Inmaculada, obispo de Ciudad del Este.
La ordenación episcopal será este 21 de diciembre, en la Catedral de dicha diócesis. Hasta esa fecha, el monseñor Ricardo Valenzuela será el administrador apostólico.
El padre Guillermo Steckling, es oriundo de Alemania, tiene 67 años de edad y 40 años de servicio como sacerdote.
Desde 1998 hasta 2010 fue superior general de los Misioneros Oblatos, en Roma. Actualmente es rector del Seminario Mayor de los Oblatos de María Inmaculada, Escolasticado Beato José Gerard, en Lambaré.
El otro cambio se da en el obispado de Encarnación, donde fue nombrado el padre Francisco Pistilli Scorzara, sacerdote del Instituto Secular de los Padres de Schoenstatt, en reemplazo de monseñor Claudio Silvero Acosta, quien presentó su renuncia al Sumo Pontífice.
El sacerdote Francisco Pistilli Scorzara,tiene actualmente 49 años de edad y 17 años de sacerdocio; nació en Asunción y fue ordenado el 10 de marzo de 1990 en Schoenstatt, Alemania.
Desde el 2004 hasta el 2011 fue maestro de novicios en Tuparendá. Actualmente es superior regional del Instituto Secular de los Padres de Schoenstatt para la Región del Padre, que abarca Argentina, Uruguay, Paraguay, Italia y Nigeria.
“Voy a asumir la historia de esta diócesis”
El nuevo obispo de Ciudad del Este, Guillermo Steckling, recibió a la corresponsal de ÚLTIMA HORA, Noelia Duarte, a quien dijo que su nombramiento fue una gran sorpresa.
El sacerdote indicó que se considera un voluntario, por lo que recibe esta misión y tratará de cumplirla. Además agregó que en la mañana de este sábado recibió a varios sacerdotes de la zona con quienes conversó.
Al ser consultado si estaba informado de los últimos hechos que involucran a esa diócesis, respondió: “Estoy al tanto de lo que ocurre en esta diócesis porque leo ÚLTIMA HORA, pero voy a asumir la historia de esta diócesis como un camino que Dios nos traza”.
Finalmente, dijo que en el 74 optó por Paraguay, donde trabajó hasta el final de su misión y luego fue a Roma, desde donde volvió tras, nuevamente, haber elegido a Paraguay.