Digna es esposa de Leonardo Gómez Riquelme, que fue herido por los miembros del grupo armado. Su hermano Alcides Morilla Romero fue ejecutado por los epepistas, junto a su secretario Rodrigo Gómez González.
Todo sucedió pasadas las diez de la mañana, cuando los miembros de la comunidad se disponían a tomar tereré. Ahí fueron sorprendidos por los guerrilleros.
Eran seis a ocho personas y el grupo lo integraban indígenas y uno de ellos habría disparado hacia su marido, afirmó.
“Hablé con mi marido y me dijo que les torturaron un poco y que le pegaron con la culata de un fusil”, dijo la mujer, que cree que Osvaldo Villalba y compañía llegaron hasta la zona con la intención de quedarse con las tierras.
“Son 13.000 hectáreas, y es selva completa. No es comunidad indígena, es un lugar sagrado. Quieren hacerse dueños de nuestro lugar”, añadió la mujer.
AMENAZAS. Digna reveló que las amenazas y los hostigamientos son de larga data y se hacían de forma presencial y por medios telemáticos. “Nunca vi a los del EPP en persona, pero recibí amenazas. La primera amenaza recibí por mensaje en mi teléfono, a ocho días de la liberación de Adelio Mendoza”, afirmó, refiriéndose al peón que fue llevado junto a Óscar Denis, el 9 de octubre de 2020 y liberado días después.
La mujer se había ganado la enemistad de los guerrilleros debido a sus declaraciones en la prensa y por haber organizado una búsqueda de Mendoza junto con otros indígenas en la zona.
Morilla es una de las principales referentes de la comunidad y lamenta la persecución de la banda criminal, afirmando que esto va en contra de su discurso a favor de los pobres.
“Desde hace mucho tiempo, escuché que ellos (el EPP) perseguían a los ricos, pero era mentira. ¿Por qué persiguen a los pobres?”, se preguntó. Tanto ella como su hermano Alcides, descienden de un largo linaje de líderes de la zona.
Buscan a más miembros heridos de la banda criminal
Los investigadores buscan a más miembros de la banda criminal que estarían deambulando por la zona. Algunos de ellos habrían recibido balazos en medio de la refriega y estarían heridos. Por ello se está realizando un fuerte operativo con agentes de la Fuerza de Tarea Conjunta y seguido de cerca por parte del fiscal Pablo Zárate, que fue designado para investigar el caso junto a sus colegas Lorenzo Lezcano y María Irene Álvarez. Los investigadores encontraron algunas evidencias en las pertenencias de los abatidos. Hallaron explosivos en las mochilas. Sin embargo, no encontraron teléfonos celulares ni pendrives como en otra ocasión.