El juez de Garantías, Raúl Florentín, que interina a su colega Julián López, le dio ayer el arresto domiciliario con prohibición de salida del país, y una caución real sobre un inmueble por un monto de G. 3.000.000.000. Fue a pedido de su abogada Gessy Ruiz Díaz.
Tras la resolución dictada ya en horas de la tarde, realizó los trámites ante la Policía y se quedó en el Hotel Armele, que será su residencia particular mientras dure el proceso.
Fue abordado por los periodistas al salir de la Agrupación Especializada. Explicó que nunca instó a la gente a ser violento o que vaya al Tribunal Superior de Justicia Electoral para ser violentos.
Comentó que argumentó sobre la resistencia a la opresión, y justificó que a Stroessner se le sacó a balazos, que la independencia paraguaya no se hubiera conseguido si no se ponían los cañones frente a la casa de los gobernadores.
Se preguntó si acaso se iba a decir a Cartes: “Señor, deje de ser narco, deje de robar...”.
Con respecto a Rafael Esquivel, explicó que nunca dijo que no debía jurar como senador. Sostuvo sobre lo que dice la ley sobre el estupro y que Mbururu debía jurar como legislador.
Criticó el actuar de la senadora Zenaida Delgado, de quien dijo que fue “tan poco sincera que firmó frente a mí el comunicado que no iba a votar por la bancada del narcopolítico y 48 horas después se puso de cuatro... políticamente hablando”.
Además, sobre la agresión que habría sufrido la senadora, remarcó que ella era histriónica, y que no había visto marcas ni moretones. Alegó que ella era legisladora, gracias a William Campuzano, que le cedió su lugar.
Ante la consulta de qué harían si se confirmaba la agresión, remarcó que ahí tenían que ver las medidas a tomar por el Tribunal de Conducta de Cruzada Nacional.
Con relación a si iba a seguir con su campaña presidencial a partir de ahora, el ex candidato manifestó que muchos dijeron que era un satélite, pero que no sabían que su campaña comenzó al salir del Senado.
Acotó que esta duró tres años y medio, y que su campaña a la presidencia duraría cinco años, que sería presidente del Paraguay en el año 2028. Paraguayo Cubas está procesado por varios delitos como supuesto autor de cinco delitos, entre ellos, perturbación de la paz pública y resistencia.