Las precipitaciones se registraron en todo el departamento, angustiando a la población, que aún no se recupera de las últimas tormentas. El nivel del río también aumentó 2 cm.
La escala hidrométrica en el puerto de Pilar, en Ñeembucú, registraba en la víspera que el río Paraguay llegó a 8,50 metros de altura, permaneciendo la alerta amarilla. En el caso de que llegue a los nueve metros, se activará la alerta naranja.
El tiempo inestable marcó toda la jornada, y los registros de agua caída fueron dispares. En la capital departamental hubo lloviznas, mientras que en los distritos ubicados más al sur, ya en la ribera del Paraná, la lluvia fue grande, como en Itá Corá, con 155 milímetros; General Díaz,102 mm, y Mayor Martínez, 90 mm.
Según Meteorología, seguirán las precipitaciones dispersas, y para el golpeado duodécimo departamento, hubo incluso una alerta de tiempo severo, pero afortunadamente no se dio, hasta el cierre de esta edición.
Según datos aportados por el Comité de Emergencia Distrital, para Pilar se espera que el río Paraguay llegue a los 9,5 metros, y posteriormente el nivel descenderá, según precisaron.
muros de contención. El Comité de Emergencia Distrital centra su atención en los sitios más críticos de la ciudad. Toda la actividad a partir de ahora se direcciona a fortalecer los terraplenes de defensa, los técnicos del Ministerio de Obras Públicas fijaron tres sitios como fundamentales, entre ellos, el muro que rodea a la fábrica textil, en la rivera del río Paraguay. De hecho, desde la víspera se activa en el sector de Manufactura Pilar SA, fortaleciendo el terraplén con bolsas cargadas con arena.
Otro lugar establecido es el barrio San Vicente, donde se instalará una motobomba de gran potencia para desagotar parte del área que ya se encuentra con problemas.
También está el sector conocido Pa’i Kue, donde ya se emprende el trabajo para fortalecer la defensa.
Estos trabajos tienen el acompañamiento del personal del Regimiento de Caballería Felipe Toledo y voluntarios.
La actividad tiene por objetivo que la defensa costera no sufra desmoronamientos cuando se activen los fuertes vientos del sur.
Todo el sistema semafórico fue desactivado para agilizar el desplazamiento de los camiones que transportan incesantemente, arcilla y arena para los objetivos. Maquinarias y operarios de la Secretaría de Obras Públicas e Infraestructuras de la Gobernación de Ñeembucú efectúan trabajos de apoyo a la Municipalidad de Pilar.
Trabajo conjunto. El secretario de Riesgos de la Municipalidad de Pilar, Fabián Ojeda, manifestó que la ciudad sigue en alerta amarilla por la crecida del río Paraguay. Refirió que se han activado todas las brigadas en la parte logística, y que los trabajos de previsión continúan en lugares que se requiere mayor atención.
Dijo que los muros tienen algunas filtraciones, pero esto no condiciona la seguridad, remarcando que después de la gran lluvia la situación está controlada.
El duodécimo departamento y la capital departamental transita uno de los peores escenarios de los últimos tiempos. La situación se da a días de cumplirse 36 años de la fatídica inundación de 1983, que dejó bajo agua a toda la ciudad. Afortunadamente el escenario actual es mucho mejor, pues en ese entonces no existía la defensa costera.
Suman familias evacuadas
El número de familias damnificadas va en aumento. Ocho familias del barrio Puerto Nuevo fueron evacuadas a los alberges establecidos, porque las aguas ya llegaron a sus casas. En el barrio General, otras siete familias ya dejaron sus hogares, se instalaron en casas de sus parientes.