Ataviados con ropa deportiva y flanqueados por colaboradores y personal de seguridad, los mandatarios efectuaron un recorrido sobre dos ruedas por las carreteras que rodean el aeropuerto de Santa Rosa, en la provincia de El Oro, limítrofe con Perú.
El presidente ecuatoriano es un gran aficionado al ciclismo e incluso apareció subido a una bici en uno de los espacios de la campaña electoral de 2013, cuando fue reelegido.
El paseo de hoy fue, además, una oportunidad para que ambos presidentes afirmaran su “amistad personal”, según dijo Humala en una intervención posterior en el hotel donde se celebra la reunión bilateral, en la localidad de Arenillas.
Humala aprovechó la excusa del recorrido para bromear. “El próximo año, que haremos el gabinete binacional en Perú, probablemente ya no lo lleve en bicicleta a Rafael, vamos a ver si vamos en patín, en ‘skate’ o nadando, no se...”.
Pero, más allá de las bromas, el gobernante quiso también usar el argumento del paseo en bici para lanzar un mensaje de esperanza a los pueblos ecuatoriano y peruano.
“Así como hemos recorrido nosotros este camino, lo hemos hecho en bicicleta, nuestros pueblos quieren recorrer ese camino, Rafael, juntos hacia el futuro”, aseveró.
