El hombre deberá cumplir una condena de 18 años de privación de libertad. Los ataques ocurrieron de manera sistemática y causaron graves daños sicológicos en la víctima.
Los antecedentes de la causa señalan que la víctima era sometida desde que contaba con 13 años. La primera vez ocurrió cuando el entonces niño fue llevado a la fuerza y sometido sexualmente en su vivienda. Posteriormente, el condenado aprovechaba las ocasiones en los que el menor se encontraba solo en su casa para agredirlo. La víctima fue sometida hasta que cumplió 14 años.
Durante el juicio, se produjeron numerosas testimoniales además de los informes periciales de las psicólogas tanto de la Fiscalía como del Poder Judicial, quienes determinaron que la víctima sufre daños sicológico a raíz de los ataques que sufrió.
El nombre de la víctima y del denunciado se omiten en cumplimiento del artículo 29 del Código de la Niñez y la Adolescencia, que prohíbe la publicación de datos que posibiliten identificar a los menores de edad en condición de víctimas. RG