Frater qui adjuvatur a fratre quasi civitas firma. El hermano ayudado por su hermano es fuerte como una ciudad amurallada, leemos en el Libro de los Proverbios.
Es esta una responsabilidad de todos los cristianos. Cada uno ha de estar atento siempre ante el bien de los demás, y muy especialmente de aquellos que, por diferentes razones, el Señor nos ha encomendado. “Estos son tus siervos, mis hermanos –escribe San Agustín–, que tú quisiste que fuesen hijos tuyos, señores míos, y a quienes me mandaste que sirviese si quería vivir contigo de ti”.
La caridad bien vivida nos otorga una gran fortaleza ante obstáculos a veces semejantes a los que encontraron los primeros cristianos.
Hemos de llegar hasta Dios bien unidos en la fe, guardándonos unos a otros, sin dejar que nadie sienta la dureza de la soledad en momentos más difíciles, por los que todos podemos pasar, “pues si una ciudad se defiende, y se ciñe de fuertes muros, y se protege por todas partes con una atenta vigilancia, pero un solo agujero queda sin defender por negligencia, por allí sin duda entrará el enemigo”. No le dejemos entrar.
El papa Francisco a propósito del Evangelio de hoy dijo: “Nosotros sabemos que la historia tiene un centro: Jesucristo, encarnado, muerto y resucitado; que está vivo entre nosotros y que tiene una finalidad: el Reino de Dios, Reino de paz, de justicia, de libertad en el amor”.
Y tiene una fuerza que la mueve hacia aquel fin: es la fuerza del Espíritu Santo. Todos nosotros tenemos el Espíritu Santo que hemos recibido en el bautismo. Y él nos empuja a ir hacia adelante en el camino de la vida cristiana, en el camino de la historia, hacia el Reino de Dios.
“Este Espíritu es la potencia del amor que ha fecundado el seno de la Virgen María; y es el mismo que anima los proyectos y las obras de todos los constructores de paz. Donde hay un hombre y una mujer constructor de paz, es exactamente el Espíritu Santo quien ayuda y lo empuja a hacer la paz”.
(Frases extractadas del libro Hablar con Dios, de Francisco Fernández Carvajal, y http://es.catholic.net)