Ayer el concejal departamental Juan Servín denunció que tras la visita realizada por él, el diputado Esteban Samaniego y el hijo de Miguel Cuevas, Enzo Cuevas, los dirigentes del asentamiento que tendrían vinculación con el cartismo, anunciaron el cierre del comedor.
Alejandro Torres, uno de los coordinadores del comedor, también señaló que “hay quienes quieren cerrar el lugar por cuestiones políticas, ya que el diputado vino a ofrecernos ayuda para que esto pueda crecer”.
Sin embargo, tras averiguar en el Ministerio de Desarrollo Social, el arquitecto Antonio Boselli, precisó que el caso está siendo analizado en la asesoría jurídica porque el predio donde se levantó el tinglado, es un espacio verde, que mediante un acuerdo entre los pobladores, el mismo quedó aprobado en el plan de regularización como un espacio de reserva. “Unas cuantas familias construyeron el comedor en donde no corresponde y la asesoría jurídica deberá determinar si se cometió un delito”, mencionó.
Por su parte, el referente de la comisión vecinal, Mauro Ríos dijo que el caso no tiene un trasfondo político.
“No estamos en contra de que se dé de comer a la gente, pero estas personas saben que cometieron un delito ambiental. Estamos a favor de preservar el medio ambiente y creemos que el comedor puede funcionar en otra parte”, dijo.