El interventor de la Municipalidad de Asunción, Carlos Pereira, tiene desde hoy una tarea por demás difícil: el desafío de auditar un municipio del mismo signo que el Ejecutivo, en medio de una guerra política.
Pereira y su equipo asumirán en la Comuna a partir de las 09:00 a través de un acto protocolar, y el titular de la Municipalidad, Óscar Nenecho Rodríguez se verá obligado a unas “vacaciones forzadas”, como él mismo lo indicó.
Pereira asumirá una doble función en la Comuna; por un lado, la gestión propia del interventor a fin de corroborar los puntos que son cuestionados por la Contraloría General de la República.
Por otra parte, la función de intendente que tendrá por el plazo que lleve adelante la intervención, por lo que se encargará de toda la gestión municipal. Trabajará por el plazo de 60 días, en principio, como estipula la ley, los cuales pueden ser prorrogables por 30 días más.
Pereira afirmó, en contacto con Última Hora, que su trabajo no es seguir instrucciones de los sectores políticos, y que no forma parte de ningún movimiento.
Dejó en claro que su trabajo va a estar sostenido en la objetividad.
“Una intervención es un trabajo que se realiza con objetividad, imparcialidad e independencia, que es la esencia de un trabajo serio de auditoría”, recalcó.
Jubilados. Una de sus prioridades es ver y averiguar por qué los jubilados no están cobrando sus haberes.
“Mi primera acción va a ser lo de los jubilados; voy a escuchar a los que están afectados y a quienes internamente están con la responsabilidad de hacer los trámites necesarios; la pregunta es: ¿Por qué no se puede transferir? Me espera una ardua tarea que permita darle calma a los distintos proveedores; quiero generar conciencia y credibilidad a la gente”, mencionó a Telefuturo.
El terreno al que irá Pereira es fangoso y se espera que realice un trabajo técnico imparcial. Determinará destino de millonarios bonos.
Si bien Pereira afirma no tener ninguna afiliación partidaria y no haber activado nunca por ningún movimiento, siempre estuvo cercano a gobiernos colorados, desde donde llevó a cabo su larga carrera en la función pública.
Durante el gobierno de Horacio Cartes fue presidente del Banco Nacional de Fomento (BNF), y actualmente es consejero del IPS, con permiso.