Alrededor de 2.000 campesinos sitiaron ayer la ciudad de Santa Rosa del Aguaray, Departamento de San Pedro, cerrando la ruta 3 en la intersección con la ruta 11, exigiendo el inmediato juicio político a Mario Abdo Benítez y Hugo Velázquez.
Marcharon por la calzada y posteriormente cerraron totalmente este tramo. Anunciaron que esta medida de fuerza recién se inicia y cada día estarán movilizados hasta conseguir el juicio político. Al mismo tiempo exhibieron un muñeco de Marito Abdo ataviado con la bandera de Brasil que posteriormente fue quemada. Los manifestantes intimaron al presidente y vicepresidente para presentar renuncia en el lapso de doce horas.
Tras cinco horas de cierre de la ruta por parte de los campesinos finalmente a las 17 horas desistieron de la movilización tras una fuerte tensión entre manifestantes y policías.
Los campesinos señalaron que volverán a cerrar la ruta el próximo martes esperando que se haga el juicio político al presidente y su vice.
Asimismo, anunciaron que acordaron con todos los sectores sociales y partidos de oposición llevar adelante la medida de fuerza por tiempo indefinido.
Los manifestantes nucleados en la Coordinadora en Defensa por la Soberanía explicaron que la única salida a esta grave crisis por el intento de entrega de Itaipú es la renuncia o destitución por la vía del juicio político de Abdo Benítez y Velázquez.
Igualmente reclamaron la cárcel para ellos y para todos los que formaron parte del intento de traición a la patria.
Por su parte, los dirigentes emplazaron a Marito a que presente su renuncia al cargo. “Este tipo intentó negociar Itaipú a espaldas del pueblo y ya no le tenemos confianza. Pidiendo perdón por sus hechos no se soluciona nada. Debe ir a la cárcel con toda su gavilla”, coincidieron los campesinos.
Anunciaron que no descartan sitiar la capital del país junto a organizaciones a nivel nacional para conseguir el juicio político o la renuncia del presidente y del vicepresidente.
La Fiscalía ordenó el despeje inmediato del cruce vial.
El fiscal adjunto, Federico Espinoza señaló “que se garantiza la manifestación pacífica, siempre que no violente los derechos de terceros, ni el derecho al libre tránsito de las personas”.