De 11 disparos fue asesinado el brasileño Valdir de Campo en el establecimiento El Ciervo, de Santa Rosa del Aguaray. La víctima fue tomada de rehén junto a otros 6 trabajadores de la estancia, entre ellos, una mujer.
Ocurrió en la mañana del lunes cuando los peones fueron sorprendidos presuntamente por una célula del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) en plena faena de tala de árboles, algo prohibido según las “leyes revolucionarias”.
Seis de los siete rehenes fueron liberados cerca de las 19.00 del lunes, mientras que Valdir fue llevado de rehén. El secuestro terminó de la peor manera. El cuerpo del brasileño fue hallado a las 23.45 por la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC).
Durante el ataque y la toma de rehenes fueron incinerados 3 camiones, dos tractores, y varios campamentos.
Varios grupos estaban trabajando en la extracción de madera en la estancia El Ciervo. El grupo de Valdir era el que lo hacía a gran escala, utilizando 5 a 6 tractores y varios camiones.
Fueron hallados en la estancia dos panfletos del EPP, donde advierten a los ganaderos y sojeros que si incumplen las “leyes revolucionarias”, serán castigados con pena máxima, la muerte.
Este establecimiento ya fue blanco de ataques del EPP en setiembre de 2015, cuando fueron asesinadas dos personas y quemados 2 tractores.
EJECUTADO. Tras la autopsia, el médico forense Pedro Araújo confirmó que el cuerpo presenta 11 impactos de balas.
“Tiene impactos de balas en la espalda, además una en la cabeza que pudo haber sido el tiro de gracia, se utilizaron armas de guerra como así también de calibre .38”, indicó el profesional.
Valdir de Campo es hermano de la viuda de Darlis Paetzol, fallecido hace años, y hermano de Rudy Paetzol, hacendado de Yaguareté Forest e intendente de la ciudad brasileña de Coronel Sapucaia, fronteriza con Capitán Bado.
¿y el menor? Un menor de edad huyó del lugar luego de notar la presencia de miembros del EPP. Ayer apareció.
El vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), Luis Apesteguía, expresó a Última Hora que el joven no presenta ningún problema de salud, pero que está asustado por lo sucedido.
Confirmó que el menor era parte del grupo que fue interceptado por los epepistas, pero huyó del lugar. El adolescente se presentó ayer en la Comisaría de Pacola. Por seguridad no se publican los nombres del menor.
