El decreto que permite el ingreso a Brasil sin necesidad de requerir visado de turistas procedentes de EEUU, Canadá, Australia y Japón comenzó a regir ayer y puede generar ingresos adicionales para el país por unos USD 1.000 millones anuales, anunciaron fuentes oficiales.
La entrada en vigor fue celebrada por el ministro de Turismo de Brasil, Marcelo Álvaro Antonio, que acudió al aeropuerto internacional de Río de Janeiro para recibir personalmente a turistas procedentes de EEUU y que fueron los primeros en beneficiarse de la exención de visados.
El decreto del Gobierno que exime de visa a los turistas de esos países sin la respectiva reciprocidad, ya que los brasileños aún tienen que pedir permiso para visitar esas naciones, fue firmado por el presidente Jair Bolsonaro tras la visita que hizo en marzo a EEUU. Bolsonaro justificó su decisión en los beneficios económicos que puede generar ya que, según los cálculos del Gobierno, el aumento de los visitantes de 4 importantes generadores de turistas puede suponer ingresos anuales adicionales para el país por USD 1.000 millones. La medida, ayudará al Gobierno a cumplir la meta que se propuso de duplicar el número de turistas extranjeros que visita Brasil, desde 6 millones en 2018 hasta 12 millones en 2022. EFE