La encuesta, de la firma Ipsos-Mori y emitida por las cadenas BBC, ITV y Sky al cierre de anoche de los colegios electorales, otorgó a los “tories” 368 escaños, 42 más de los necesarios para alcanzar la mayoría absoluta en el Parlamento.
Este es el mejor resultado para los conservadores desde las elecciones generales de 1987 con Margaret Thatcher como líder, y mejora al anticipado del miércoles último por otra encuesta sobre intención de voto, que no daba por segura la mayoría absoluta para Johnson.
En la oposición, el Partido Laborista del izquierdista Jeremy Corbyn sufrió un duro golpe al sacar, según la proyección de Ipsos-Mori, 191 diputados, lo que supone el peor resultado para la formación roja en unos comicios generales desde 1935.
Tras el resultado del sondeo de boca de urna, Johnson tuiteó para agradecer a todos los británicos que le votaron y calificar al Reino Unido como la “mejor democracia del mundo”.
VICTORIA ANTICIPADA. La encuesta se realizó en 144 circunscripciones británicas y, al igual que ocurrió en las elecciones pasadas, suele ser muy acertada a la hora de anticipar el resultado oficial.
Para llegar a la mayoría absoluta, Johnson necesita 326 escaños, la mitad más uno del número de asientos que componen la Cámara de los Comunes (baja) del Parlamento de Westminster.
Con Johnson como líder, los conservadores dan un gran salto frente a los 317 escaños que obtuvieron en las elecciones de 2017 con Theresa May al frente del partido, en tanto que los laboristas retroceden al obtener 71 escaños menos que en 2017.
Los proeuropeos del Partido Liberal Demócrata obtienen 13 escaños -uno más que en 2017-, pero el gran vencedor es el Partido Nacionalista Escocés (SNP) de Nicola Sturgeon, al sacar, según el sondeo de boca de urna, 55 de los 59 asientos que tiene la región en la Cámara de los Comunes del Parlamento de Westminster.
En su Twitter, Sturgeon dijo que el sondeo “sugiere una buena noche” para su formación, aunque indica que el panorama para el Reino Unido es “sombrío”, en clara alusión a la victoria de Johnson.
Corbyn, que hizo campaña con un programa de inversión en los servicios públicos y nacionalizaciones, aún no se pronunció sobre el sondeo de boca de urna, pero el portavoz laborista de Economía, John McDonnell, reconoció que el partido tomará “las decisiones apropiadas” sobre el futuro del líder de la oposición.