Los resultados del supermartes, en el que se escogía un tercio de los apoyos para la nominación demócrata, fueron cayendo poco a poco del lado de Biden: Carolina del Norte, Massachusetts, Virginia, Minnesota, Tennessee, Arkansas, Alabama, Oklahoma, Maine y, finalmente, Texas. Sanders, en tanto, registraba triunfos en: Colorado, Utah, Vermont y California, la joya de la corona, de la cita electoral que en EEUU marca un antes y un después en el proceso de primarias.
CONVENCIÓN. Pero más que la victoria en los estados, la clave está en el margen de cara a la obtención de los delegados que elegirán al nominado en la convención de Milwaukee de julio.
Por ahora, y mientras sigue el conteo de los últimos votos, Biden lleva sumados los resultados parciales del martes y los votos previos 467 delegados frente a los 392 de Sanders.
Además, la resaca electoral se extendía ayer con el anuncio del abandono de Michael Bloomberg, el multimillonario ex alcalde de Nueva York, que expresaba su respaldo a Biden, reforzando así a la moderada del Partido Demócrata.
“Hace tres meses, entré en la carrera presidencial para derrotar (al presidente de EEUU, el republicano) Donald Trump. Hoy, dejo la carrera por la misma razón; para derrotar a Trump”, aseguró Bloomberg, quien gastó más de 500 millones de dólares en la campaña electoral, según datos de su equipo.