La bajante extrema del río Paraguay no deja de generar complicaciones para la navegación. En este contexto, el retraso en el traslado produce una acumulación de cargas de trasbordo de importación y exportación tanto en el puerto uruguayo de Montevideo como en el de Buenos Aires, Argentina.
Esta situación fue confirmada ayer por el titular del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym), Esteban Dos Santos. Aclaró que los depósitos en dichos puertos no están abarrotados, sino que sufren atrasos para hacer el trasbordo y, por ende, esto genera sobrecostos.
“Lo que ocurre por la bajante de los ríos Paraguay y Paraná es que el tiempo de navegación de las embarcaciones que hacen el tramo mundial se detiene. Estamos al doble de tiempo de una situación normal. Además, la cantidad de carga que se toma en cada viaje se redujeron por debajo del cuarenta por ciento de la capacidad que tienen las embarcaciones”, explicó.