20 abr. 2024

Avivados disfrazados de estúpidos

Alfredo Boccia Paz galiboc@tigo.com.py

Una mayoría de diputados descuartizó el proyecto de modificación de la ley de financiamiento político que pretendía darle algo más de claridad al origen de los fondos de campaña. Es desolador que los políticos paraguayos actúen en sentido contrario a la tendencia mundial de las democracias occidentales de transparentar sus instituciones. Pero es aún más curioso que, para terminar construyendo un inservible Frankenstein, hayan apelado a argumentos tan endebles, falsos y ridículos. Hubo diputados que parecían estar compitiendo en un concurso de estupidez.

Varios sostuvieron que la ley sería imposible de cumplir por los candidatos del interior porque no sabrían llenar una declaración jurada ni entenderían los trámites exigidos. Además, dijeron con toda seriedad, no se puede hacer el control en las internas partidarias porque allí solo son “precandidatos” y no “candidatos”. Pero aún, en las elecciones generales solo los “ordenadores de gastos”, es decir presidente, gobernadores e intendentes, tendrán la obligación de informar sobre el origen de la plata de su campaña electoral.

Según ellos, no vale la pena controlar a los concejales municipales y departamentales, ni a los que pugnan por cargos partidarios, porque en esos ámbitos no hay corrupción.

¿En qué mundo vivirán estos tipos? El diputado Sebastián Villarejo expresó certeramente que esas campañas son verdaderas lavanderías de los narcos y, de paso, recordó el motivo por el que la diputada Tarragó prolongó su estadía en los Estados Unidos.

Con diversas explicaciones cínicas excluyeron del circuito de control a la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad) y, sobre todo, a los bancos. También evitaron que el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) cuente con una unidad especializada para la prevención del lavado. Hicieron tantos cambios que la ley de declaraciones juradas, aprobada anteriormente, fue cercenada en varios puntos. En el colmo de la insensatez hubo quien afirmara que la ley no servía, pues no se puede facturar el voto que se compra, naturalizando la corrupción electoral.

Los ejecutores de esta bestialidad son casi todos diputados colorados. Hay excepciones, pero debe decirse que la mayoría proviene del interior, son fruto de cacicazgos regionales muy corruptos, siempre cercanos al primer eslabón de contacto entre el mundo narco y el mundo político. Su aporte en los debates parlamentarios suele ser muy pobre, pero son defensores férreos de la obscuridad. Sin el dinero sucio, jamás serían diputados. De hecho, sin ese estímulo, la política no les hubiera interesado.

Lo que estos diputados pretenden es que nadie los controle individualmente. Que solo se verifiquen las finanzas de los partidos y movimientos. Con la aprobación del desbloqueo de listas, eso es absolutamente insuficiente. Las próximas elecciones se inundarán de narcocandidatos.

Como esto es racionalmente indefendible, se ven obligados a apelar a argumentos impresentables. Por eso parecen idiotas. Solo parecen, pues estos miserables se matan de risa de usted, de mí y de toda la gente.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.