La autopsia que se practicó a la joven Romina Zárate (18), quien falleció el pasado 15 de marzo en una clínica privada de Coronel Oviedo, confirmó que fue dengue la causa de su muerte.
De acuerdo al análisis de los especialistas la joven sufrió las manifestaciones poco usuales, que producen daños en el corazón, hígado y otros órganos internos y que la prensa local denomina “dengue visceral”. Su caso fue revisado ayer por la Comisión de Cierre de Casos, conformada por médicos de varias especialidades, que tiene a su cargo el estudio pormenorizado de las víctimas durante la epidemia.
En la víspera fueron revisadas dos historias clínicas, de las cuatro previstas inicialmente, ya que las otras dos no contaban con los resultados de todos los estudios laboratoriales. De acuerdo al informe oficial, uno de esos casos se confirmó como dengue y fue inscripto en las estadísticas oficiales, mientras que el otro se descartó. Con este caso suman 14 el número oficial de víctimas fatales, 6 de ellas por dengue hemorrágico, 6 por dengue visceral y 2, sin suficientes datos para clasificarlos. En total, otros 7 casos estudiados fueron descartados como víctimas del dengue. Es decir, los pacientes murieron de otras patologías.
Aunque los nombres de los pacientes ya no son dados a conocer por la junta médica, trascendió que el caso confirmado fue el de la joven ovetense, cuyos familiares iniciaron una demanda por negligencia médica al propietario de la clínica donde fue asistida. El caso descartado corresponde al de una señora que había fallecido en su casa de Luque, después de deambular por varios servicios.