Ricardo Meyer, decano de FADA, afirmó que para lograr ese objetivo presentarán un proyecto al Ministerio de Salud Pública para ampliar la capacidad de producción.
“Esta mascarilla no se consigue ni en el mercado internacional porque es muy requerida. El hecho de que tengamos un laboratorio de fabricación suplanta esa escasez. Por eso necesitamos más máquinas. Solicitamos que nos puedan prestar. Esto se va a seguir donando, esto no se vende”, expresó en entrevista a NPY.
De momento, fabricaron al menos 1.200 mascarillas con ocho máquinas 3D, de las cuales cinco son de la casa de estudios y tres son prestadas de particulares.
El objetivo es contar con 50 máquinas en total para llegar a producir 10.000 máscaras al mes.
Meyer comentó que ya donaron un lote de esos insumos al Hospitales de Clínicas, al Hospital San Jorge, Hospital Materno Infantil San Pablo y al Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Salud (IICS), donde se realizan los test de coronavirus.