La solicitud de apertura de consultas se realizó mediante una carta enviada a la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, luego de que esta mantuviera en la mañana de ayer una extensa conversación con el presidente argentino, Alberto Fernández.
En la misiva, que lleva la firma del ministro de Economía argentino, Martín Guzmán, y del presidente del Banco Central, Miguel Pesce, Argentina requiere “formalmente asistencia financiera bajo un programa” con el Fondo e invita al “staff” del organismo “a una misión para comenzar las conversaciones”.
En la carta, el Gobierno argentino expresa que el país enfrenta “importantes necesidades” de balanza de pagos para el periodo 2021-2024, mayormente asociadas con los pagos de deuda que debe hacer en ese periodo al FMI.
Esa abultada deuda se generó por un acuerdo de auxilio financiero firmado en 2018 por el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019) con el organismo.
El pacto, con duras metas fiscales, preveía préstamos totales por un récord de 56.300 millones de dólares, de los cuales llegaron a desembolsarse unos 44.000 millones, cifra que representa el 13,5 % de la deuda total de Argentina y coloca al FMI como el mayor acreedor externo del país.
El Gobierno ya había advertido que Argentina no tiene capacidad para pagar al FMI en los plazos establecidos y ayer Guzmán reiteró que el nuevo acuerdo deberá incluir una reprogramación de los vencimientos con el FMI como “paso necesario” para resolver la crisis económica que vive el país. EFE