Mientras tanto, el país austral sumaba ayer once nuevos casos del nuevo virus, por lo que el total ascendió a 56 infectados, dos de los cuales murieron. “Lo que tenemos que lograr es minimizar la circulación del virus. Son todos casos importados y tenemos que lograr que tarde lo más posible en convertirse en un virus autóctono”, subrayó el presidente, quien aseguró que su objetivo ahora es “ganar tiempo”.
dureza. ”Hemos tomado la decisión de que durante los próximos 15 días vamos a cerrar las fronteras y nadie podrá ingresar, salvo obviamente los argentinos nativos o extranjeros residentes en Argentina”, explicó el mandatario en una rueda de prensa en Buenos Aires tras mantener una reunión con su Gobierno y especialistas sanitarios.
Fernández, que ya el jueves pasado decretó la emergencia sanitaria y anunció que a partir del martes se suspenderá la llegada de vuelos de los países de Europa, EEUU o China, donde mayor propagación se está dando del virus, aseveró que por la frontera terrestre también llegan turistas procedentes de zonas de riesgo.
En consonancia con el endurecimiento de la política de prevención, autoridades de la Dirección Nacional de Migraciones expulsaron ayer a varios extranjeros llegados de países de alta circulación de coronavirus que se negaron a cumplir la cuarentena de 14 días obligatoria para personas en su situación.
Otra de las medidas anunciadas es la suspensión de las clases de primaria y secundaria por dos semanas, aunque las escuelas permanecerán abiertas para atender a las necesidades de los niños y brindar alimentación a los sectores de menores recursos.
REDUCIR IMPACTO. Una de las preocupaciones centrales del Gobierno de Fernández es el impacto económico social de la pandemia y de las medidas para frenar la proliferación del virus en Argentina, un país con más de un tercio de la población sumida en la pobreza y un desempleo que roza el 10%.
“La actividad económica se va a restringir”, reconoció el presidente, al anunciar que hoy tendrá una reunión del gabinete económico-social para evaluar medidas de contención.
Por ello, el Ejecutivo desestimó decretar por el momento una cuarentena generalizada en Argentina por los efectos que tendrá en una economía en recesión desde abril de 2018.
“Si paro durante 14 días la producción de alimentos, vamos a generar un gran problema en la Argentina. Es un tema que tiene muchas consecuencias económicas, en muchos casos muy negativas y que en algunos casos ni siquiera ayudan a combatir la pandemia”, subrayó. Las autoridades debatirán cómo disminuir el tránsito de personas por el área metropolitana, con trece millones de habitantes y donde hay más casos.
Caos en los aeropuertosde América
El caos en los aeropuertos de EEUU, la prohibición de ingreso a extranjeros en Colombia y el toque de queda en Puerto Rico alteraron la calma ayer en América, aunque los presidentes de México, Brasil y Nicaragua siguen desafiando a la pandemia con sus acciones o sus convocatorias. EEUU amaneció con caos en sus aeropuertos debido a la avalancha de estadounidenses regresando al país antes de que las aerolíneas empiecen a cancelar vuelos procedentes de Europa debido a la escasa demanda. Las filas y los tiempos de espera eran enormes debido a la orden de someter a los pasajeros procedentes de Europa a controles que descarten síntomas del Covid-19. En tanto, México implementará acciones como la suspensión temporal de actos no esenciales. EFE
