Los anticuerpos que neutralizan el Covid-19 permanecen en la sangre durante al menos ocho meses después del contagio, según un estudio italiano publicado el martes.
Se trata de una observación registrada “independientemente de la gravedad de la enfermedad, la edad de los pacientes o la presencia de otras patologías”, sostiene el estudio realizado por el prestigioso Hospital San Raffaele de Milán (norte) en colaboración con el Instituto Superior de Salud (ISS), el organismo que asesora al gobierno en materia de salud pública.
“La presencia de anticuerpos, aún si disminuyen con el tiempo, es muy persistente”, sostiene el estudio.
Ocho meses después del diagnóstico, sólo tres pacientes de 162 no daban positivo en la prueba de anticuerpos, explicaron en un comunicado conjunto San Raffaele e ISS.
PRESENCIA TEMPRANA. Los estudiosos italianos consideran que la presencia temprana de esos anticuerpos es “fundamental para combatir con éxito el contagio, ya que aquellos que no los producen en las dos primeras semanas después del contagio tienen un mayor riesgo de desarrollar formas graves de Covid-19", recalcaron.
“Los pacientes que no pueden producir anticuerpos neutralizantes durante la primera semana de infección deben identificarse y tratarse a tiempo, ya que tienen un alto riesgo de desarrollar formas graves de la enfermedad”, afirmó la directora de la Unidad de Evolución y Transmisión Viral del San Raffaele, Gabriella Scarlatti.
El estudio fue realizado por la Unidad de Evolución y Transmisión Viral del Hospital San Raffaele, en colaboración con investigadores del Instituto de Investigación en Diabetes de la misma entidad, quienes desarrollaron un test específico para los anticuerpos utilizando técnicas empleadas para el estudio de otro tipo de anticuerpos desarrollados como respuesta autoinmunitaria.
Gracias a las vacunas contra el VIH, los investigadores del San Raffaelle e ISS también han desarrollado un nuevo método para evaluar los anticuerpos que protegen del SARS-CoV-2.
MAPEO. El estudio, publicado este martes en Nature Communications, permitió “mapear de forma casi exhaustiva la evolución en el tiempo de la respuesta de los anticuerpos al Covid-19", estiman ISS y San Raffaele.
El estudio se llevó a cabo siguiendo a 162 pacientes positivos al SARS-CoV-2 (67% de ellos hombres, con una edad media de 63 años) que acudieron a emergencias del San Raffaele durante la primera ola de la pandemia en Italia.
Las primeras muestras de sangre se recolectaron cuando les fue diagnosticado el contagio en marzo-abril del 2020, y las últimas a finales de noviembre del 2020.
El 57% padecía de una patología distinta al covid-19 en el momento del diagnóstico. La más frecuente era la hipertensión (44%) y diabetes (24%).
REACTIVACIÓN. La investigación también analizó la reactivación de anticuerpos frente a coronavirus estacionales, los responsables del resfriado, y concluyó que estos “reconocen parcialmente el nuevo coronavirus y pueden reactivarse tras la infección, aunque no son efectivos para neutralizarlo”.
No obstante, se trata de una buena noticia, ya que se temía que la expansión de este tipo de anticuerpos ralentizara la producción de los específicos para el SARS-CoV-2 y tuviera efectos negativos en el curso de la infección.
Nuevo test detecta el virus en cuatro minutos
El equipo del biotecnólogo español César de la Fuente finalizó el ensayo clínico de su test de diagnóstico rápido y demostró la detección del Covid-19 en cuatro minutos, informa a Efe el investigador. Los resultados del ensayo fueron publicados en la revista Matter de Cell Press y el precio de cada test es de 4,67 dólares.
La prueba usa tecnología electroquímica que transforma la información química que ocurre cuando el virus se une a un receptor en una señal eléctrica, un enlace que puede ser detectado rápidamente.
Esta herramienta necesita un chip que puede ser creado con materiales muy económicos como papel, cartón o diferentes polímeros. Se imprime en una impresora específica creada por el propio César de la Fuente, profesor de la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos).
Los investigadores que llevan adelante este estudio diseñaron dos formatos para realizar el test, uno de ellos es del tamaño de un portátil y otra versión en miniatura para conectar a un teléfono móvil. Además, es capaz de detectar variantes mutantes de SARS-CoV-2. El proceso de comercialización todavía está en camino. EFE