Ante las transformaciones demográficas y sociales que atraviesa el país, Rocío Galiano Marés, representante Nacional del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) plantean un desafío urgente: Establecer una política de cuidado integral y equitativa.
Entre las transformaciones se citan la disminución de la fecundidad, el aumento de la esperanza de vida, la urbanización, el crecimiento de hogares con jefatura femenina y la creciente participación laboral de las mujeres.
Estos puntos, sostienen desde UNFPA, exigen repensar el actual modelo de atención. La demanda de cuidados tradicionalmente se atendió por la vía familiar e informal con un claro sesgo de género, lo cual es insostenible atendiendo los cambios.
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El 57% de las mujeres de 14 años y más realizan tareas de cuidado no remuneradas frente al 43% de los hombres. Ellas dedican casi el doble de tiempo semanal que los hombres (12,9 frente a 7,5 horas), según cifras oficiales.
El valor económico del trabajo no remunerado de cuidado también evidencia su peso: En el 2016, se estimó en 20,9 billones de guaraníes, de los cuales el 74% fue aportado por mujeres.
Esta carga impide que muchas mujeres se integren plenamente al mercado laboral, por lo que el 39% está fuera de la fuerza de trabajo, cifra que se eleva a 44% en zonas rurales, según los datos de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC) del 2024.
“Con un sistema de cuidados se lograría la provisión de servicios de calidad centrados en el bienestar de la persona cuidada; la redistribución más equitativa del trabajo entre hombres y mujeres, y el reconocimiento del valor económico y social de este trabajo”, dijo.
Impacto en la tasa de fecundidad
Por ello, para moderar la caída de la fecundidad, desde UNFPA instan a ocuparse de los temas que desincentivan a las personas a tener menos hijos, como no tener un sistema de cuidados.
La tasa de fecundidad es de 1,93 hijos por mujer, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) del 2024. Esta cifra revela que la ausencia de sistemas de apoyo desincentiva a muchas personas a formar familias más numerosas.
“La falta de cuidado infantil accesible, licencias adecuadas y servicios de salud reproductiva limitan las opciones, especialmente para mujeres jóvenes”, dijo la representante del UNFPA.
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Para paliar esta situación se propone la creación de servicios de cuidado infantil (como guarderías, centros de desarrollo infantil o la extensión de las jornadas escolares y de atención a la salud) como parte de una política.
Además, políticas de conciliación de vida productiva y reproductiva, permisos de maternidad y paternidad, la corresponsabilidad entre hombres y mujeres en los cuidados y el trabajo doméstico, la prevención de la violencia basada en género, el empoderamiento y educación de las mujeres.
La representante de UNFPA señaló que aparte de todo este panorama, Paraguay sigue ostentando la razón de mortalidad materna más alta del Cono Sur.
“Entonces, debemos enfocarnos en reducir la mortalidad neonatal, materna y fetal, todas estas muertes prevenibles en un 90%”.
En 2022, se registraron 88,8 muertes por cada 100.000 nacidos vivos, muchas de ellas prevenibles. Mejorar el acceso equitativo a servicios de salud y métodos anticonceptivos modernos, en especial en zonas vulnerables, es clave para reducir estas cifras, destacan desde el UNFPA.