Este es el panorama que describió ayer sobre la bajante del cauce hídrico y la operatividad del puerto en la capital del Departamento de Ñeembucú, el subgerente comercial de la Administración Nacional de Navegación y Puertos, Víctor Centurión.
Apuntó que se están preparando para tener un ambiente similar o peor al que tuvieron con el estiaje del año 2012, que “fue terrible”.
Mencionó que la institución ya tomó sus precauciones y se está acercando la draga frente mismo al muelle del puerto y tenerla lista para que no se produzcan problemas con las maniobras.
LOGÍSTICA. Centurión detalló que tienen dos máquinas portacontenedores de cuarenta toneladas, báscula para cien toneladas y la grúa del muelle preparada para cualquier eventualidad.
Agregó que el pasado domingo terminaron de embarcar arroz luego del desgraciado accidente que se produjo en el puerto privado de Caacupemí. “Embarcamos entre 1.220 y 1.300 toneladas de arroz cada una. Un buque, por su calado, no podía arribar hacia Villeta y Asunción. Le hicimos un alije correspondiente y dejaron acá unos cuantos contenedores que ahora están retirando”, precisó.
Sobre el estiaje de este momento en Pilar, señaló que es preocupante porque ya se están viendo bancos de arena al costado del muelle y de la fábrica de Manufactura Pilar. “Es crítico lo que se ve. Ahora nuestros técnicos una vez que estén con las dragas van a tener con mayor precisión el calado para la navegación. La profundización se va a hacer en la zona de nuestro muelle para que podamos operar con mayor capacidad de maniobra”, precisó.
El nombrado funcionario dijo que con esta bajante, las cargas de importación tendrán que ver si pueden llegar a Villeta y Asunción con media carga o menos. “No van a tener otra y también tenemos que lidiar con la bajante del río Paraná”, remarcó.